El 21 de agosto, en el barrio rural de Tavşantepe (Çullî), en el distrito de Bağlar de Amed (Diyarbakır), desapareció Narin Güran, de 8 años de edad, y su cuerpo sin vida fue encontrado el 8 de septiembre. Después de ser asesinada, la niña fue metida en un saco y llevada a la orilla del arroyo, donde fue sumergida en el agua dentro del saco, que estaba cubierto con ramas de árboles y piedras de manera que no despertara sospechas y tuviera un aspecto natural.

La acusación preparada contra el tío de Narin, Salim Güran, su madre Yüksel Güran, su hermano Enes Güran y su vecino Nevzat Bahtiyar fue aceptada el miércoles por el 8º Tribunal Penal Superior de Diyarbakır.

El tribunal pidió cadena perpetua agravada para cuatro acusados, todos ellos en prisión, por el cargo de "participación en un homicidio intencional contra un niño".

Los cuatro acusados ​​comparecerán ante el tribunal el 7 de noviembre.