Provocadas por la muerte de la mujer kurda de 22 años Mahsa Amini bajo custodia de la policía moral en septiembre, las protestas en Irán y Kurdistán Oriental han dejado 90 días atrás.

Sonya Sharif, que fue puesta en libertad tras dos meses de detención, fue recibida ayer por una multitud masiva en la ciudad de Abadan, en la provincia de Ilam. El evento se convirtió en una manifestación.

Una ciudadana llamada Elireza Kerim fue conmemorada en la ciudad de Shabadi, en la provincia de Kermanshah, 40 días después de que fuera asesinada por las fuerzas del régimen.

A las familias de seis ciudadanos que fueron condenados a muerte en la ciudad de Urmia se les ha impedido visitar las prisiones.

A pesar de los arrestos y asesinatos, las protestas antigubernamentales continúan en muchas ciudades de Irán y Kurdistán Oriental.

Según una declaración de la Organización de Derechos Humanos de Irán del 14 de diciembre, 493 ciudadanos han sido asesinados por las fuerzas del régimen desde el día en que comenzaron las protestas hasta el 13 de diciembre. Además, revelaron que 68 de las personas muertas por las fuerzas iraquíes eran menores de 18 años.

Se informa que al menos 18.424 personas han sido detenidas durante las manifestaciones hasta el momento.