Según un comunicado escrito del Ministerio de Salud iraquí, 4.000 personas acudieron de urgencia a los hospitales con dificultades respiratorias debido a la fuerte tormenta de arena en el país.

Se informa que los vuelos se han suspendido temporalmente en los aeropuertos de Bagdad, Najaf y Sulaymaniyah. Además, las escuelas han estado cerradas en todo el país durante un día.