¿Quién es Hakan Fidan, el nuevo ministro de Asuntos Exteriores de Turquía con poderes de espía?

El tenebroso y discreto jefe de los servicios de inteligencia turcos, Hakan Fidan, está a punto de saltar a la palestra y tomar el timón de la diplomacia del país después de que el presidente turco Recep Tayyip Erdogan lo nombrara.

El tenebroso y discreto jefe de los servicios de inteligencia turcos, Hakan Fidan, está a punto de saltar a la palestra y tomar el timón de la diplomacia del país después de que el presidente turco Recep Tayyip Erdogan lo nombrara, el sábado pasado, nuevo ministro de Asuntos Exteriores.

Fidan, que ha dirigido la Agencia Nacional de Inteligencia turca (MIT) desde 2010, no es ajeno al mundo diplomático. En los últimos años, como jefe de espionaje, ha mantenido contactos diplomáticos con aliados y enemigos del país en todo el mundo.

Fidan, de 54 años, ha sido uno de los pocos hombres de confianza del presidente turco y ha ocupado diversos cargos desde que Erdogan se convirtió en primer ministro, en 2003. Antes de asumir el cargo de jefe de inteligencia, Fidan ya era objeto de curiosidad cuando actuaba como enviado especial del entonces primer ministro Erdogan en el desaparecido proceso de paz entre el proscrito Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) y el gobierno turco.

Junto con su predecesor en el MIT, Emre Taner, y otros funcionarios de los servicios de inteligencia, Fidan, cuyo padre es de etnia kurda, participó en las conversaciones con los altos dirigentes del PKK, en 2009. Las conversaciones de paz, que duraron de 2008 a 2015, tenían como objetivo encontrar una solución negociada al problema kurdo del país, que dura ya décadas, desarmando al grupo en su lucha contra el Estado turco y por el autogobierno.

El mandato de Fidan en el MIT tuvo un comienzo accidentado en 2010 con una serie de artículos críticos publicados en los medios de comunicación occidentales e israelíes, que cuestionaban su lealtad a los socios tradicionales de Turquía, incluidos Estados Unidos e Israel. El fallecido ministro de Defensa israelí Ehud Barak se enfrentó públicamente al nombramiento del maestro del espionaje en aquel momento. Barak afirmó que Fidan mantenía estrechos vínculos con Irán, citando su papel como representante de Turquía en el Organismo Internacional de Energía Atómica desde 2008 hasta su nombramiento en el MIT.  

Sin embargo, en los últimos años de su mandato, el MIT se convirtió en el único canal de diálogo entre Turquía e Israel, así como con otras potencias regionales con las que Ankara había deteriorado sus lazos. Fidan también se reunió varias veces con sus homólogos sirios en el periodo previo a las conversaciones políticas de alto nivel entre Ankara y Damasco, en 2022, mediadas por Rusia.

El nuevo jefe de la diplomacia turca sigue siendo en gran medida un misterio para la opinión pública por haber mantenido un perfil discreto. Nunca ha concedido entrevistas durante su carrera en el gobierno, incluso cuando las historias sobre él y el MIT saltaban a los titulares, alimentando la curiosidad pública en torno al jefe de espionaje más joven de la nación.

Fidan se convirtió en uno de los primeros y más frecuentes afectados por las desavenencias entre Erdogan y su antiguo aliado, convertido en enemigo, el clérigo suní que ahora vive en Estados Unidos, Fethullah Gulen, y sus seguidores en la burocracia turca, que se oponían a las conversaciones de paz.

El año 2012 marcó un punto de inflexión en la carrera de Fidan y en los vínculos entre Erdogan y el movimiento de Gulen. Un fiscal turco citó a Fidan y a otros altos cargos de los servicios de inteligencia para interrogarles, acusándoles de vínculos “terroristas” por su papel en las conversaciones con el PKK. La medida provocó un gran enfrentamiento entre los servicios de inteligencia y la burocracia judicial del país. Fidan y los demás agentes de inteligencia se negaron a acudir a la citación siguiendo las instrucciones de Erdogan. Tras el enfrentamiento, el partido gobernante de Erdogan aprobó un proyecto de ley que otorgaba al órgano secreto un escudo legal y ampliaba su poder.

El fiscal que citó a Fidan y sus colegas fue condenado posteriormente por sus vínculos con el movimiento Gulen, tras el intento de golpe de Estado de 2016. Ankara, que acusa al movimiento de Gulen de planear el intento de golpe para derrocar a Erdogan, designó al grupo como organización terrorista. 

A Fidan se le atribuye una actitud prudente hacia los gulenistas desde el principio de su carrera. La agencia de inteligencia ha sido una de las pocas instituciones en las que los gulenistas han sido relativamente incapaces de penetrar, como demuestra la purga contra los seguidores del movimiento tras el intento de golpe de Estado.

Tras la intentona golpista de 2016, la inteligencia turca tomó la iniciativa de perseguir y purgar a los gulenistas de la burocracia estatal, llevando a cabo múltiples entregas extraordinarias desde todo el mundo, lo que suscitó fuertes críticas de grupos cívicos internacionales.

Con Fidan al mando, el MIT también desempeñó un papel destacado en la lucha de Turquía contra los grupos kurdos-sirios. Turquía equipara a estos grupos con el PKK, considerado organización terrorista por la mayoría de las capitales occidentales.

Las operaciones de contraespionaje de la agencia también se hicieron más prominentes durante el mandato de Fidan, con múltiples redadas de redes de espionaje israelíes, iraníes y rusas que acapararon los titulares internacionales y nacionales en los últimos años.

Fidan también acompañó a Erdogan y al ministro de Asuntos Exteriores saliente, Mevlut Cavusoglu, en viajes al extranjero de alto nivel, especialmente a Washington y Moscú.

Cuando se hizo cargo del MIT, Fidan no era un desconocido en el mundo de los servicios de inteligencia.  De formación militar, Fidan había servido en el Mando de Inteligencia y Operaciones del Cuerpo de Reacción Rápida de la OTAN, en Alemania, como parte de su carrera como ex suboficial del ejército entre 1986 y 2001. Su debut en la función pública fue su nombramiento como director de la agencia de ayuda internacional del país, TIKA, en 2003, cargo que ocupó hasta 2007, cuando se convirtió en subsecretario adjunto del entonces primer ministro Erdogan y en su enviado especial.

A Fidan le sucederá en el MIT el portavoz del presidente Erdogan y máximo asesor en política exterior, Ibrahim Kalin.

FUENTE: Ezgi Akin / Al Monitor / Traducción y edición: Kurdistán América Latina