Un combatiente de las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF, por sus siglas en inglés) resultó herido el lunes por la tarde en un atentado suicida con un vehículo en el este de Siria. Según fuentes de seguridad, la bomba explotó en un puesto de control del Mando de las Fuerzas Especiales (Hêzên Komandos) al norte de Deir ez-Zor. El combatiente herido estaba de guardia de seguridad.

Según los informes, el asesino había conducido hasta un puesto de control en la aldea de al-Azba. Su coche, cargado de explosivos, estalló allí y el puesto quedó gravemente dañado. Las imágenes de vídeo del lugar del atentado muestran una humareda oscura y los restos de un vehículo en llamas. La SDF sospechan que el ISIS está detrás del atentado.

Las células del ISIS siguen activas

En 2014, el ISIS invadió amplias zonas de Irak y Siria e instauró un reino de terror. La milicia yihadista proclamó un «califato» más allá de las fronteras nacionales. En agosto de 2014, el ISIS llevó a cabo un genocidio y feminicidio en la principal zona de asentamiento yazidí de Shengal, en el noroeste de Irak, asesinando a más de 10.000 personas. El ISIS fue expulsado de Irak en 2017 y de Siria dos años después. Pese al desmantelamiento del dominio territorial de la milicia terrorista en marzo de 2019, principalmente gracias a los combatientes kurdos, las células durmientes siguen activas y perpetran atentados en la zona.

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