Más civiles han sido secuestrados en la ciudad de Afrin, en el norte de Siria, que ha sido ocupada por el ejército turco y mercenarios aliados durante más de tres años. Según informes sobre el terreno, los mercenarios de Faylaq al-Sham, afiliados al Estado turco, han secuestrado a dos jóvenes de la aldea de Kefer Sefra en el distrito de Jindires.

Los dos jóvenes, llamados Mistefa Mihemed Mecid (18) y Mihemed Welid Hisên, fueron secuestrados con el argumento de que habían trabajado anteriormente para las instituciones de la Administración Autónoma.

Según los informes, los dos civiles fueron llevados al centro de detención de la aldea de Iska, en el distrito de Sherawa, que es conocido por ser un centro de tortura.

Se ha establecido un régimen terrorista en Afrin, que ha estado bajo ocupación turca desde marzo de 2018. Crímenes como el secuestro, la ejecución, la tortura, el saqueo y el desplazamiento forzado se han convertido en una rutina diaria en la ciudad.

Según el portavoz de la Organización de Derechos Humanos de Afrin, İbrahim Şêxo, al menos treinta y siete civiles fueron secuestrados en julio. Şêxo afirmó que la estructura demográfica en Afrin continúa cambiando, y agregó que el mes pasado se confiscaron veintiuna casas y lugares de trabajo por diversas razones. Şêxo también señaló que las personas que se hacen cargo de las tierras de sus familiares no pueden arar. Además, se han confiscado productos agrícolas y olivos en casi una treintena de aldeas.