El campo de Mabruka en la ciudad de Serekaniye, en el norte de Siria, alberga a miles de personas que fueron desplazadas de sus hogares por los ataques de los mercenarios del ISIS y las fuerzas del régimen.
La Administración Autónoma del norte y este de Siria anunció que el campo está bajo amenaza de ataque y, por lo tanto, será evacuado.
La declaración de la Administración Autónoma indicó lo siguiente:
“El estado turco anunció el lanzamiento de la incursión en el norte y el este de Siria el 9 de octubre de 2019. Han violado las leyes internacionales y han puesto en peligro la vida de los civiles. Esto va en contra de los derechos humanos y las leyes internacionales.
El campo de Mabruka, que se encuentra a 12 km de la frontera entre Siria y Turquía y alberga a siete mil personas, está bajo la amenaza de una agresión militar turca. Del mismo modo, el campo de Ayn Issa que es el hogar de 13785 refugiados está bajo la mismo amenaza. Allí 479 son familias del ISIS y refugiados iraquíes.
A pedido de los civiles que están en el campamento, nosotros en la Administración Autónoma hemos decidido evacuar el campo debido a los ataques del estado turco. Los refugiados se establecerán en el campamento Arisha al sur de Heseke.
Por otro lado, nuestras conversaciones con los funcionarios continúan sobre la situación en el campamento de Ayn Issa. La Administración Autónoma hará todo lo que esté a su alcance para asegurar la vida de los residentes del campamento. A menos que las Naciones Unidas y la Coalición Internacional cumplan con sus responsabilidades para con los refugiados, la vida de todos los refugiados en los campamentos seguirá en peligro.
Hacemos un llamado a las Naciones Unidas y a las organizaciones de derechos humanos para que cumplan con sus responsabilidades y presionen para que el estado turco respete los requisitos de la Convención de Ginebra y las leyes internacionales".