El Consejo Democrático Sirio (MSD) ha emitido un comunicado sobre el uso de la violencia por parte del gobierno de Damasco contra los civiles y el cambio en la estructura demográfica de Siria.

La declaración es una reacción al asesinato de civiles por las fuerzas militares en Daraa y pide a Rusia que cumpla su misión de garante.

El MSD dice: “Seguimos con ansiedad la reciente imposición de poder en el sur de Siria. En particular, se acordó con los representantes de la ciudad hasta hace unos meses el levantamiento del embargo. Esta confusa situación surgió 3 años después del acuerdo firmado entre las provincias de Daara y Quneytira con Rusia como garante. La insistencia del gobierno de Damasco en el método militar proviene de sus fracasos en el pasado. Es obvio que los acuerdos alcanzados no serán como ellos desean. No vemos esas reuniones como una alternativa a los diálogos políticos reales”.

Llamando la atención sobre los diferentes enfrentamientos, el MSD subraya la necesidad de proteger a la población de Daraa y pide a Rusia que cumpla su misión de garante y busque soluciones para los civiles que permanecen en los barrios.

Los habitantes de Daraa no deben abandonar sus tierras

El MSD continúa: “Condenamos el uso de la violencia por parte del gobierno de Damasco contra los civiles en Daraa. La estructura demográfica de la mayor parte de Siria está siendo modificada por los estados regionales. Los habitantes de Daraa no deben abandonar sus tierras. Deben rechazar estas políticas de desplazamiento. Cambiar la estructura demográfica de un lugar es un crimen de guerra.

Las condiciones internacionales han cambiado. No podemos ver en Daraa lo que ocurrió en 2011. La comunidad internacional y la ONU deben presionar en este asunto y actuar con urgencia. Hay que evitar la guerra civil. Hay que apoyar el diálogo”.