Según un informe del medio de comunicación ANHA, el portavoz de la Organización de Derechos Humanos de Afrin, İbrahim Şêxo, compartió información sobre los crímenes cometidos por el Estado turco en el cantón del norte de Siria desde el comienzo del año.

Şêxo reveló que al menos 25 civiles han sido secuestrados en los pueblos y distritos de Afrin. Además, se han talado unos 900 olivos y se han dañado dos lugares históricos.

Respaldado por el servicio de inteligencia turco (MIT), el grupo mercenario Sultan Süleyman Shah, también conocido como Amashat, sigue cometiendo crímenes en la región, dijo Şêxo, desvelando que la limpieza étnica continúa en Afrin en medio del silencio de las fuerzas internacionales.

Miles de civiles secuestrados en cuatro años

Turquía ha establecido un régimen de terror y corrupción en todas las regiones que ha ocupado, especialmente en Afrin, invadida desde marzo de 2018. Crímenes como los secuestros, las ejecuciones, las torturas, los saqueos o la migración forzosa se han convertido en el pan de cada día de los ciudadanos y ciudadanas del cantón.

Según los defensores de los derechos humanos, el ejército turco y los grupos yihadistas aliados han matado a más de 700 civiles y han secuestrado al menos a 8.500 en Afrin en los últimos 4 años. El paradero de casi la mitad de los secuestrados y secuestradas sigue siendo desconocido. Al menos 70 mujeres han sido violadas en el mismo periodo, y más de 300 mil personas han sido desplazadas por la fuerza de sus casas y tierras desde 2018.