Durante la noche, estallaron feroces combates entre el ejército turco y sus mercenarios, por un lado, y las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), por otro, cerca de las aldeas asediadas de Muelek y Seyda, en el distrito autónomo de Ain Issa, en el norte de Siria.

Las tropas turcas lanzaron un ataque terrestre hacia la 1:30 de la madrugada, que fue respondido inmediatamente por las SDF. En el proceso, un vehículo militar perteneciente a los atacantes fue destruido y un tanque fue alcanzado. Mientras los combates en torno a las aldeas continuaron durante toda la noche, el ejército turco bombardeó con proyectiles de artillería la autopista M4, de importancia estratégica, y las localidades circundantes.

Los ataques en la región han aumentado masivamente en los últimos meses. Con el beneplácito de Rusia, potencia garante del alto el fuego incumplido por Turquía, ésta intenta ocupar el distrito de Ain Issa cortando la conexión entre las regiones autónomas de Rojava.