En Til Temir, los residentes locales han lanzado piedras a una patrulla rusa, informó la Agencia de Prensa del Norte. El domingo por la mañana, los ataques de artillería de las fuerzas de ocupación turcas han vuelto a golpear las aldeas que rodean la ciudad del norte de Siria. Más de diez proyectiles de mortero y de artillería alcanzaron las aldeas asirias de Tel Tawil y Tel Karabit, en el oeste de Til Temir. La protesta de la población de Til Temir se dirige también contra la interrupción del suministro de agua y electricidad. El agua ha sido utilizada durante mucho tiempo por el Estado turco como arma contra la región autónoma del norte y el este de Siria. Desde el martes, tampoco hay electricidad debido a los ataques turcos. Los trabajos de mantenimiento de la línea eléctrica en Tel Karabet tuvieron que ser suspendidos a causa de los permanentes ataques.
La población culpa a Rusia de los continuos ataques del ejército turco y sus aliados yihadistas porque el país actúa como potencia garante del alto el fuego en la región negociado en octubre de 2019. Ya el 19 de agosto tuvo lugar una sentada de bloqueo frente a la base rusa de Til Temir. Unos días antes, los residentes de la ciudad de Zirgan (Abu Rasen) detuvieron a una patrulla rusa y condenaron el silencio sobre el bombardeo turco, en el que se dispararon más de 50 proyectiles que mataron a una mujer y a un niño e hirieron a decenas. Hace unos días, también se produjeron protestas en Kobanê frente a una base rusa.
En Til Temir, el centro de comunicaciones del consejo militar fue bombardeado por drones turcos la semana pasada. Cuatro miembros de las SDF, entre ellos el comandante de las YPJ Sosin Bîrhat, murieron.