Las Fuerzas de Liberación de Afrin (Hêzên Rizgariya Efrînê, HRE) publicaron el balance de los ataques del ejército turco y de los yihadistas aliados de los meses de agosto y septiembre.
La declaración subrayaba que: "El ejército de invasión turco y los grupos terroristas bajo su mando, que han ocupado la región de Afrin desde el 20 de enero de 2018 y han provocado el desplazamiento de personas a Shehba, han continuado con sus ataques genocidas disfrutando del silencio de los estados internacionales, de las llamadas organizaciones internacionales de derechos humanos y de la comunidad internacional. Este silencio sobre los ataques cada vez más continuos conduce a una amenaza permanente para la población civil que vive en la región".
HRE señaló que las fuerzas del ejército de invasión turco han atacado directamente a la población civil en los ataques genocidas que han llevado a cabo en violación del derecho internacional en los últimos dos meses.
"Además, los ataques destruyen los viñedos, los huertos y las tierras agrícolas de la población. Las personas que fueron desplazadas por el terror del ejército turco y encontraron refugio en los campos de Shehba tienen que vivir bajo el fuego de obuses, morteros, tanques y drones. Con estos ataques, el ejército turco está tratando de ahuyentar a la gente de Afrin e implementar una política de genocidio".
El HRE informó de que el ejército turco también ha establecido nuevas bases, especialmente en las regiones de Afrin, Azaz y al-Bab.
BALANCE DE ATAQUES
Según el balance bimensual del HRE, los ataques de las tropas turcas y de los aliados yihadistas se han dirigido contra los siguientes lugares;
Distrito de Shera: Mer'enaz, Malikiyê, Şewarixa, Kela Şewarixa, Minix Elqemiyê y Eyn Deqnê.
Distrito Sherawa: Soxanekê, Aqîbê, Meyasê, Başemrê, Birc Qas, Bênê y Gundê Mezin.
Región de Shehba: Herbil, Semûqa, Bêlûniyê, Şe'alê, Til Zîwan, Til Cican, Nêrebiyê, Til Medîq, Şêx İsa y Şêx Hîlal y Til Rifat
Se produjeron 76 ataques, de los cuales seis fueron acompañados por vehículos aéreos no tripulados.
Durante los ataques se dispararon 1868 obuses, tanques y granadas de mortero, así como cientos de miles de disparos de armas pesadas.
Nueve personas resultaron heridas y los ataques causaron graves daños materiales.
La declaración de la HRE concluyó afirmando que seguirán resistiendo:
"Nosotros, las Fuerzas de Liberación de Afrin, recalcamos una vez más que ninguno de estos ataques quedará sin respuesta, y que continuaremos nuestra resistencia sin interrupción hasta que Afrin sea liberado y su pueblo vuelva a casa".