Hay muchos combatientes como la guerrillera Nişa Yiğit Botan, de las YPJ, en la Revolución de Rojava.

Llegó un momento en que padres e hijos lucharon juntos en los mismos frentes. Llegó un momento en que madres e hijas tomaron las armas para proteger su tierra. Y continúan haciéndolo, a través del HPC (Hêzên Parastina Cewherî) en Rojava.

En muchos lugares, los hijos, las hermanas, los primos, en resumen, todos, desde el núcleo familiar hasta los familiares más lejanos, forman parte de las HPC, las SDF, las YPG y las YPJ.

La combatiente Nişa Yiğit Botan, de las YPJ, es una de estas personas. Ella se casó a los 19 años y tiene una hija. Se unió a su marido en las filas de las YPG durante la guerra en Afrin. Su marido cayó mártir en aquella guerra de tan solo un mes de duración.

Nişa se unió a las filas de las YPJ también para vengar a sus compañeros que cayeron mártires en la honorable resistencia y la guerra por la liberación.

Sobre el proceso de unirse a las YPJ, Nişa Yiğit Botan ha dicho: “En la sociedad, las mujeres son criadas sólo para estudiar, casarse y tener hijos. La familia y el Estado tienen mucha influencia en el destino de las mujeres. Me casé como resultado de estas presiones sobre mi persona. La guerra comenzó en Afrin en el primer año de mi matrimonio. Mi marido se unió a la guerra y cayó mártir en el primer mes”.

Botan ha continuado: “Me impresionó mucho el martirio de mi marido y de muchos otros amigos. Aunque las familias eran patrióticas, muchos no querían la participación de las mujeres en la guerra, especialmente de las casadas. Yo estaba decidida y dije que debía unirme a las YPJ, levantar el arma de mi marido y tomar venganza. Cuando me uní a las filas de las YPJ fue duro al principio, fue duro, tengo una hija, esto puede ser un obstáculo. Pero a medida que fui conociendo a las mujeres de las YPJ, mi determinación creció y me hice más fuerte y segura de mí misma. Dije que debía luchar por mi país y por nuestros mártires. Si una persona tiene metas, nada es un obstáculo”.

Y ha añadido: “Cuando conocimos la filosofía y la ideología del líder Apo, nos dimos cuenta de que no estábamos solos. Como mujer y madre siríaca, comprendí que mi participación en las YPJ es para todos los pueblos oprimidos y por la hermandad de los pueblos. La perspectiva del líder Apo también se basa en esto. Las mujeres son líderes en todos los campos. Nuestro objetivo es liberar Afrin. Lucharé para que la gente vuelva a vivir junta y regrese a sus tierras”.