El estado turco utiliza todos los medios a su disposición para hacer cumplir su política expansionista neo-otomana, al hacerlo, no rehuye explotar la difícil situación de las y los refugiados. Al parecer, ha comenzado el proyecto turco de asentar refugiados de Siria en las zonas ocupadas por Turquía y sus mercenarios.
Según un informe de Afrin - Organización Siria de Derechos Humanos, el estado turco trajo un primer grupo de más de 100 refugiados a la zona ocupada en el cantón de Girê Spî, en el norte de Siria. Las y los refugiados de Homs, Alepo, Idlib y Ghouta Oriental fueron alojados en las casas de la población kurda desplazada. Al mismo tiempo, el Estado turco sigue adelante con la construcción de urbanizaciones prefabricadas. Las personas asentadas allí recibirán documentos de identidad y tendrán derecho a visitar Turquía cuatro veces al año.
El estado turco está tratando activamente de cambiar la demografía del norte y este de Siria. Al hacerlo, se basa en políticas de expulsión y asentamiento. A largo plazo, Turquía quiere ocupar y anexionarse una franja de Siria que se extiende hacia el sur.