Cientos de personas protestaron frente a una base rusa en Kobanê contra los ataques turcos al noreste de Siria. La acción fue organizada por la organización paraguas de mujeres Kongreya Star en la región del Éufrates. La protesta fue dirigida contra la inacción de Rusia ante los continuos ataques del estado turco, que resultan en muertes y heridas diarias. Rusia actúa como potencia garante del alto el fuego negociado en 2019, que Turquía nunca ha cumplido.

El activista kurdo Eyşe Efendî declaró lo siguiente frente al cuartel general de la policía militar rusa: "Ya hemos estado aquí varias veces y exigimos que se detengan los ataques del Estado turco en nuestra región. Sin embargo, Rusia no está cumpliendo con su responsabilidad de la población. Si las fuerzas rusas no cumplen con su responsabilidad, deben salir de aquí. No han cumplido su palabra y, por lo tanto, no hay razón para su presencia. Deben detener los ataques turcos o abandonar nuestra región".

Eyşe Efendî, miembro del Consejo de las Familias de los Mártires en la región del Éufrates, anunció que la gente seguirá resistiendo a la ocupación turca. Señaló el alto sacrificio de la gente en la lucha contra el ISIS y afirmó que la misma actitud se aplica a la resistencia contra el estado turco.

Mientras tanto, una delegación de manifestantes transmitió sus demandas a los representantes rusos. El político del PYD, Ehmed Şêxo, dijo después de las conversaciones que la parte rusa había prometido una vez más detener los ataques.