Las Fuerzas de Seguridad Interna de la Administración Autónoma del Norte y Este de Siria, con el apoyo de las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF), reforzaron hoy el cerco alrededor de la prisión de Sina en Hesekê. El plan es aislar aún más a los terroristas restantes y recuperar el control de la prisión lo más rápido posible. Los alrededores inmediatos del centro de detención ya están bajo control. Actualmente, sin embargo, los enfrentamientos en el barrio se intensifican.

Cuatro días después del intento de asalto a la prisión en el distrito de Xiwêran (Ghweiran), todavía hay focos de resistencia dispersos dentro de las células durmientes del ISIS. La coalición internacional anti-ISIS ha llevado a cabo nueve ataques aéreos en el complejo penitenciario desde el lunes por la mañana, y también continúan las operaciones en los alrededores para capturar a los mercenarios de la organización terrorista escondidos en edificios residenciales. Unos 25 miembros de la milicia yihadista fueron detenidos hoy cuando intentaban huir del barrio o rendirse. Entre ellos también había cinco islamistas que vestían ropa de mujer.

Mientras tanto, las SDF señalaron que los prisioneros del ISIS involucrados en la insurgencia dentro de la prisión estaban abusando de varios menores como "escudos humanos". Eran niños que habían sido reclutados por la organización juvenil del ISIS "Cachorros del Califato" y estaban alojados en la sala de rehabilitación del centro de detención. Alrededor de 700 niños y jóvenes a quienes se les había enseñado la doctrina del ISIS fueron rehabilitados recientemente en un anexo especial. Las SDF pidieron a las Naciones Unidas (ONU) y al Comité Internacional de la Cruz Roja que tomen medidas para estos jóvenes.