El suministro de agua y electricidad para las personas en el norte y este de Siria todavía está en la mira del estado turco. Especialmente en Til Temir y Zirgan, en la frontera con los territorios ocupados del norte de Siria, las líneas eléctricas y de agua son constantemente destruidas.

Hace seis meses, las fuerzas de ocupación turcas destruyeron el tendido eléctrico que suministra electricidad a más de 40 aldeas cerca de Til Temir y Zirgan. Desde entonces, Turquía ataca a quienes quieren acercarse a realizar cualquier tipo de reparación, a pesar del acuerdo negociado de alto el fuego entre Turquía y Rusia.

El co-presidente de la dirección de electricidad de Til Temir, Fehid Samia, indicó que "Durante un total de seis meses hemos estado esperando que Rusia persuade a Turquía para detener los ataques a nuestros equipos de reparación. Si los ataques se detienen, podremos reparar fácilmente las líneas. El 24 de marzo, logramos reconectar algunas aldeas a la red eléctrica. 36 horas después, las líneas fueron bombardeadas nuevamente y se cortaron".

Los pueblos afectados son aquellos que están en la ruta de patrullas ruso-turcas.

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