Manbij ha estado bajo ataque por fuerzas yihadistas afiliadas a Turquía desde el 1 de septiembre. El martes, cuatro miembros de las Fuerzas de Seguridad del Norte y Este de Siria (Asayîş) murieron en combates. En un ataque a gran escala el viernes pasado, cuatro hermanos de diez, catorce, quince y diecisiete años murieron por fuego de artillería turca. El sábado, una mujer de 70 años murió y otras personas resultaron heridas en un pueblo del frente noroeste. Un comandante del Consejo Militar de Manbij, Bozan Berkel, perdió la vida tras la detonación de una bomba colocada en su coche en Manbij esta mañana.

Mientras el Estado turco y sus mercenarios aliados continúan su agresión en la región, las fuerzas de ocupación atacaron esta mañana la aldea de Tehne en el oeste de Manbij y otras aldeas al este de al-Bab.

El bombardeo de la aldea de Tehne dejó heridos a tres niños de una misma familia. Los niños, llamados Îbrahîm El Casim (12), Celal El Casim (14) y Wîam El Casim (15), fueron trasladados al Hospital Berkel de Manbij para recibir tratamiento.

Según el asistente quirúrgico Ehmed El Elî, los tres niños fueron llevados directamente a la operación tan pronto como fueron llevados al hospital por la mañana. Los cirujanos tuvieron que extirpar el bazo de dos de los niños que habían sido alcanzados por fragmentos de proyectil en el estómago.  

Ehmed El Elî dijo que Wîam El Casim, de 15 años, sufrió una lesión muy crítica entre el riñón y el estómago y podría perder su riñón en las próximas horas.