Turquía sigue cortando el agua del Éufrates
El Estado turco lleva 30 meses cortando el agua que fluye del Éufrates.
El Estado turco lleva 30 meses cortando el agua que fluye del Éufrates.
El corte de la parte del agua del río Éufrates que corresponde a Siria por parte de Turquía comenzó en 2017. Desde entonces, el agua se ha cortado de vez en cuando. Pero desde el 27 de enero de 2021, el Estado turco ha estado cortando el agua sistemáticamente.
El Estado turco ha estado liberando solo 200 metros cúbicos de agua por segundo en lugar de 500 metros cúbicos. Esto viola el protocolo de 1987 entre Siria y Turquía.
El nivel del Éufrates ha descendido mucho debido al corte de agua durante 30 meses. Los lagos situados detrás de las tres presas del río Éufrates en Siria, la mayor de las cuales es la presa del Éufrates en Tabqa, han disminuido considerablemente.
Aunque el embalse de la presa del Éufrates contiene 14.500 millones de metros cúbicos de agua, recientemente ha disminuido en 4.000 millones de metros cúbicos debido a la disminución del agua procedente del Kurdistán Meridional. El agua liberada por el Estado turco no es suficiente para cubrir las necesidades de agua potable, riego y generación de electricidad de la región.
La Administración Autónoma del Norte y Este de Siria ha pedido a las potencias internacionales y a los gobiernos de Damasco e Irak que presionen a Turquía para que actúe de acuerdo con el derecho internacional y no robe a Siria e Irak su parte del agua del Éufrates. Sin embargo, los gobiernos de Damasco y Bagdad guardan silencio y no adoptan ninguna postura contra el Estado turco.
Recientemente, el presidente sirio, Bashar Assad, declaró durante la visita del primer ministro iraquí, Mihemed Shia Sudani: "Algunos países vecinos apoyaron el terrorismo y robaron las aguas de los ríos Éufrates y Tigris".
Sudani declaró que existen obstáculos comunes entre su país y Siria, pero espera que se coopere para garantizar un reparto justo del agua.
El gobierno iraquí había declarado que las reservas de agua del país estaban vacías y que el agua procedente de Turquía, Siria e Irán era inferior al 70% del reparto anterior.
Cada día en Bagdad, cientos de iraquíes protestan frente a la embajada turca contra el cierre de los ríos Éufrates y Tigris y piden el boicot de los barcos turcos. Los manifestantes también piden al gobierno de su país que tome medidas.
El 25 de junio, el presidente iraquí, Ebduletif Rashid, responsabilizó a los países vecinos de la crisis del agua en Irak y declaró: "La crisis del agua es el resultado de razones claras, entre ellas el cambio climático y las acciones de los países vecinos".
El 18 de julio, Hisên Merdan, vicepresidente de la Comisión de Agricultura y Agua del Parlamento iraquí, declaró que el Estado turco es culpable de robar el agua de Irak.