Turquía y sus mercenarios secuestran a 39 personas en Afrin en un mes

Más de 39 civiles secuestrados y 7.000 árboles talados en un mes en Afrin.

Siguen cometiéndose crímenes contra las personas y la naturaleza en Afrin, bajo ocupación turca desde marzo de 2018.

El Estado turco, que ocupa Afrin desde 2018, sigue cometiendo crímenes como secuestros, destrucción de la naturaleza, asesinatos, saqueos, robos, violaciones y cambios demográficos.

Más de 39 ciudadanos han sido secuestrados en un mes, y en este mismo periodo de tiempo se han talado 7.000 árboles y se han establecido nuevas casas coloniales y bases militares en numerosas zonas de la región.

39 ciudadanos y ciudadanas secuestrados

El Estado turco ha secuestrado a más de 39 ciudadanos y ciudadanas en Afrin desde comienzos de 2023. Estos son algunos de los nombres y edades de las personas secuestradas en lo que va de año:

Mihemed Reşid Hiso (32), Ferman Elûş Sado (28), Bekir Hisên Xêro (35), Rêber Hisên Xêro (32), Elî Kalo (40), Mihemed Ferîd (28), Mihemed Kalo (36), Ednan Ebdo (39), Mihemed Ednan Silêman (30), Mihemed Ehmed Henan Hemîd (55), Îbrahîm Menan Dawud, Mihemed Esmet Şêxo, Mihemed Selah Hisên (30), Ferîda Ebdo, Mihemed Îbrahîm Mele Mihemed (49), Dogan Mihemed Mele Mihemed (48) , Enes Zekî, Elî Reşid Omer, Tewfîq Hesen (45), Îmad Kemal Sado (44), Şiyar Mistefa Sado (20), Receb Silêman Şawax (42) y Eynayet Arif Bekir (56).

Más de 7.000 árboles talados

El Estado turco ha talado más de 7.000 árboles en Afrin desde principios de año.

Los invasores talaron 12 árboles pertenecientes a Mihemed Fewzî Xelîl, Mistefa Xelîl y Ziyad Xelîl, 20 árboles pertenecientes a Osman Hec Hemîd y 520 árboles pertenecientes a Reşid Ebdo, Rêzan Ebdo, Mistefa Ebdo, Mihemed Îbo y Mistefa Mihemed. Además, también talaron 100 árboles pertenecientes a Mistefa Yasîn y su hermano, 300 árboles pertenecientes a Izet Ebdo Diwêkê y Omer Bilal Nasan, y otros 100 pertenecientes a Kemal Mamend y Mistefa Cafer.

Además, talaron miles de árboles en zonas forestales de Mebata y Cindirêsê.

Saqueos

Los ocupantes han continuado también con sus delitos de confiscación de bienes y animales.

En este contexto, robaron 16 ovejas pertenecientes a un ciudadano llamado Mamo Hesen, 2 ovejas a Mamde Fewzî y 6 ovejas a Omer Hesenkê en la aldea de Kimare.

En el distrito de Bilbil, los invasores confiscaron las tiendas pertenecientes a los ciudadanos Kîbar Hiso, Hisên Henan Birîm, Reşîd Mihemed, Seydo Menan, Osman Beko, Omer Esed Henan, Meryem Mihemed, Xalîde Elî, Emine Hesîno, Emine Hisên Koto y Cemîle Xelîl. Asimismo, la casa de un ciudadano llamado Ehmed Hano (65) fue confiscada en Zeydiye.

Cambios demográficos

El 4 de enero, el Estado turco construyó casas coloniales llamadas Ajnadîn entre los pueblos de Himêlka y Rifatiyê, al este de Cindirêsê. Estas estructuras se construyeron en una superficie de 4.000 hectáreas pertenecientes a los ciudadanos llamados Hesen Mecîd Mihemed y Emîn Murad Mihemed.

El objetivo principal de las casas coloniales es asentar a los mercenarios del ISIS y sus familias, y cambiar la estructura demográfica de Afrin.

Bases militares y centros de drogas

El Estado turco también ha amenazado de muerte a los ciudadanos Îzet Ebdo Diwêkê y Omer Bilal Nasan, obligándoles a abandonar sus tierras agrícolas en Raco y estableciendo en ellas una base militar.

Por otra parte, los mercenarios de Tehrîr al-Sham (HTS) han instalado una fábrica de producción de drogas en Qîbarê, un pueblo yazidí de Shera. Las materias primas de las drogas son suministradas por dos mercenarios llamados Abu Ebdullah Horan y Abu Ehmed Helawa.