39 diputados y diputadas neozelandeses han escrito una carta al presidente turco Recep Tayyip Erdoğan, al ministro de Justicia turco Yılmaz Tunç, y al ministro del Interior turco Ali Yerlikaya, en vísperas de la 1000ª reunión de las Madres de los Sábados, instándoles a permitir su reunión sin obstrucciones.

Las Madres de los Sábados celebrarán mañana, 25 de mayo, su 1000ª reunión en la plaza Galatasaray de Estambul, para exigir responsabilidades por sus familiares desaparecidos o asesinados bajo custodia policial en las décadas de 1980 y 1990.

Los diputados y diputadas subrayan la represión a la que se enfrentan las Madres de los Sábados a pesar del carácter pacífico de sus manifestaciones de larga duración.

La reunión número 700 de las Madres de los Sábados en 2018 fue dispersada violentamente por la policía. Desde entonces, la plaza Galatasaray ha sido cerrada al público para impedir que las Madres de los Sábados se reúnan allí, a pesar de ser uno de los lugares más céntricos de la ciudad.

Esto, de hecho, se lleva a cabo en violación de las sentencias del Tribunal Constitucional de abril de 2023, que determinó que prohibir las concentraciones era inconstitucional.

Los diputados y diputadas enumeran varias demandas en relación con la libertad de reunión, la persecución y las reivindicaciones de las Madres de los Sábados. "Las autoridades turcas deben aplicar las sentencias del Tribunal Constitucional y tomar medidas inmediatas para permitir que las Madres de los Sábados se reúnan en la plaza de Galatasaray", instan los diputados.

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