Colegios de Abogados en el Kurdistán: “La paz es una necesidad vital”

15 colegios de abogados del Kurdistán emiten una declaración en la que subrayan: “Para transformar en felicidad duradera el anhelo que sienten millones de personas que anhelan la paz, es una necesidad vital convertir la paz negativa en paz positiva”.

PROCESO DE PAZ

Quince colegios de abogados situados en el Kurdistán publicaron una declaración conjunta sobre la decisión del PKK de disolverse y deponer las armas tras su congreso celebrado del 5 al 7 de mayo, en respuesta al llamamiento por la paz y una sociedad democrática de Abdullah Öcalan, realizado el 27 de febrero.

En una declaración titulada “Debemos construir una paz positiva”, afirman: “El proceso de conflicto armado que nuestro país, y especialmente nuestra región, ha soportado durante décadas ha causado un inmenso sufrimiento, un profundo trauma social y graves violaciones de los derechos humanos. En un ambiente en el que se violó el derecho a la vida y a la integridad corporal, se suspendieron las libertades, se desplazaron millones de personas y se criaron generaciones en la desconfianza y la polarización, la sociedad no ha logrado más que perder”.

La paz no es simplemente la ausencia de conflictos, sino que también requiere la construcción de un sistema en el que los problemas se resuelvan y salvaguarden de forma racional.

La declaración añade: “En este contexto, la decisión del PKK de poner fin a sus actividades armadas y disolver su estructura organizativa representa, para nosotros y nosotras, un hito histórico y un acontecimiento que podría abrir la puerta a una nueva era social.

Como colegios de abogados regionales, consideramos que el silenciamiento de las armas y el fin de la violencia en todas sus formas es un avance positivo para la paz social y la vida democrática. Sin embargo, también hacemos hincapié en que la paz no es simplemente la ausencia de conflictos, sino que también requiere la construcción de un sistema en el que los problemas se resuelvan y salvaguarden de forma racional.

Somos conscientes de que una paz duradera y reparadora no puede lograrse simplemente deponiendo las armas”.

Qué hacer

Los colegios de abogados han esbozado los pasos necesarios que hay que dar de la siguiente manera:

“Protección de los derechos fundamentales y respeto de los mismos como base para el establecimiento de un orden social democrático,

Garantizar la libertad de pensamiento, expresión y asociación sin exponerse a la represión o a la amenaza de castigo,

Poner fin a las prácticas que vulneran la igualdad de ciudadanía y promulgar disposiciones legales y constitucionales que la refuercen,

Poner en práctica la justicia restaurativa, hacer frente a las graves violaciones de derechos humanos cometidas en el pasado y activar mecanismos eficaces para establecer la justicia, eliminando la amenaza de criminalización de las actividades y expresiones políticas, poniendo fin a los nombramientos de fideicomisarios y respetando la voluntad popular,

Promulgar las normas jurídicas necesarias para los presos y presas gravemente enfermos respetando la dignidad humana y el derecho a la salud, y abordar la situación jurídica de los antiguos miembros de la organización que han depuesto las armas”.

Paz positiva

La declaración continúa: “Para convertir en felicidad duradera el anhelo que sienten millones de personas que anhelan la paz, la transformación de la paz negativa en paz positiva es una necesidad vital. Una Turquía que logre la paz positiva y la democratización alcanzará sin duda un nivel inspirador de desarrollo social y prosperidad para todos nosotros y nosotras.

Como colegios de abogados que abogan por una vida compartida y digna en estas tierras, declaramos respetuosamente a la opinión pública que seguiremos estando del lado de una solución democrática, de los derechos humanos universales y de la paz social”.

Los siguientes colegios de abogados firman la declaración: Adiyaman, Agrî, Batman, Bingöl, Bitlis, Dersim, Amed, Hakkari, Kars, Muş, Siirt, Idır, Urfa, Şirnak, Van.