Por 251º día consecutivo, Emine Şenyaşar, de 70 años, exige justicia para su marido y dos de sus hijos, víctimas del linchamiento llevado a cabo por una turba del AKP en el distrito de Suruç en junio de 2018, con una vigilia frente al Palacio de Justicia de Urfa. La lucha de la mujer mayor cuenta con un amplio apoyo en la sociedad. El domingo, la vigilia recibió la visita de una delegación del Partido de los Trabajadores de Turquía (TIP), incluido el vicepresidente Barış Atay. El político expresó la plena solidaridad de su partido con Şenyaşar.

Desde el 9 de marzo, Emine Şenyaşar y su hijo Ferit se sientan todos los días frente al tribunal de Urfa para exigir el castigo de los asesinos de su marido Hacı Esvet y de sus hijos Celal y Adil. Los tres hombres habían sido asesinados por los guardaespaldas armados y familiares del diputado del AKP Ibrahim Halil Yıldız durante una gira de campaña pocos días antes de las elecciones parlamentarias y presidenciales. Sólo uno de los 23 atacantes implicados está en prisión. El juicio se retrasa y la justicia turca no muestra ningún interés en resolver los asesinatos y castigar a los autores. En su lugar, la familia desconsolada se convierte en víctima de una represión sistemática. Fadıl Şenyaşar, otro hijo de Emine Şenyaşar, sobrevivió al intento de linchamiento, pero fue condenado a más de 37 años de prisión por el asesinato de uno de los atacantes -que se demostró que fue disparado por su propia gente-.

"Aquí, la gente fue literalmente ejecutada de forma atroz y horrible porque se negó a votar a un diputado de un partido político. Es un acto de absoluta maldad", dijo Atay tras hablar con Emine y Ferit Şenyaşar. Con palabras afiladas, el político criticó el hecho de que los responsables de esta "masacre" no hayan sido llevados ante la justicia durante tres años y medio. Además de la negativa de las autoridades a intervenir en términos de esclarecimiento y persecución judicial en este caso, también criticó que hasta la fecha no se haya detenido a Ibrahim Halil Yıldız. "El destino impuesto a esta familia es un reflejo de la historia del AKP y también refleja el desarrollo de su poder judicial", dijo Atay. El diputado dijo que admiraba a Emine Şenyaşar por su extraordinario coraje y fortaleza demostrados durante este "calvario", asegurándole que seguiría apoyándola en su lucha por la justicia.