La Asociación de Derechos Humanos (IHD) ha emitido una declaración por escrito en el aniversario del Genocidio de Dersim.

La declaración señala que las operaciones militares contra Dersim comenzaron con una decisión del Consejo de Ministros a fecha 4 de mayo de 1937, en el marco de la Ley Tunceli con número 2884 y fecha 25 de diciembre de 1935, y que “decenas de miles de kurdos/alevíes fueron masacrados. Las acciones militares duraron hasta 1938, y Dersim se despobló sustancialmente por el desplazamiento forzoso como resultado de la matanza masiva”.

Se lleva a cabo una política de despoblación

Señalando que, como defensores de los derechos humanos, describen las masacres de Dersim en 1937-38 como “genocidio”, tal como se define en el artículo 76 del TCK, la İHD declara lo siguiente:

“Los residentes de Dersim siguen refiriéndose a lo ocurrido como un genocidio. Si bien la IHD califica de genocidio lo ocurrido en Dersim en 1937-1938, sostiene que es necesario afrontar el pasado en términos de derecho en el marco de los derechos humanos. Es posible enfrentar el pasado. En nuestra declaración del 25 de noviembre de 2011 señalamos que creemos que es un comienzo importante que el primer ministro Erdogan haya utilizado el término ‘masacre’ para describir lo que ocurrió en Dersim en 2011 en la reunión de los presidentes provinciales del AKP y se haya disculpado en nombre del Estado.

Para hacer frente a lo sucedido en Dersim, el Estado debe formar primero una ‘Comisión de la Verdad para Dersim’ en el seno del Parlamento. Tras la finalización del trabajo de la comisión, es importante crear los acuerdos legales necesarios de acuerdo con las recomendaciones de la comisión, centrándose en el reconocimiento del genocidio, las disculpas y la justicia restaurativa. Además, sin esperar a estos pasos, exigimos la restauración del nombre de Dersim, la restauración de la dignidad de Seyit Rıza y sus compañeros que fueron ejecutados en el genocidio de Dersim, la revelación de sus lugares de enterramiento, la debida apertura de las otras fosas comunes, la revelación del destino de las niñas que no fueron asesinadas pero fueron capturadas vivas como resultado de las operaciones militares y su reencuentro con sus familias, la cancelación del HEPP y de otras presas que siguen en construcción, el fin de la destrucción natural y cultural, la preservación de los centros naturales y culturales de Dersim y su entrega a los representantes locales del pueblo de Dersim”.