Hoy es 1 de mayo... Los trabajadores viven en condiciones difíciles a causa de la crisis económica provocada por las inversiones realizadas por el Estado turco en la guerra. Los trabajadores tienen dificultades para llevar el pan a sus casas.

Los trabajadores del sector de la construcción con salarios diarios tienen dificultades para pagar el alquiler de sus casas. La contradicción es que están construyendo apartamentos de lujo mientras experimentan condiciones de trabajo muy duras.

Nuestro salario no compra nada

Uno de los trabajadores, Kemal Deveci, declaró que trabajan todos los días, pero que no pueden dormir sin pensar en el día siguiente. "No podemos dejar de pensar en cómo conseguir aceite y azúcar para nuestra casa. Por ejemplo, hace un año podíamos comprar muchas cosas con nuestro salario diario, pero ahora ya no podemos comprar nada. Nos vemos obligados a pedir dinero prestado constantemente. En los últimos 3-4 meses, ha sido realmente difícil ganarse la vida. Tengo cuatro hijos, todos ellos están estudiando. No quiero que acaben en la construcción como nosotros".

No tenemos trabajo todos los días

Remzi Yıldız, que señaló que las condiciones de trabajo no eran buenas, dijo: "Llevo 32 años trabajando en la construcción. Sin embargo, aún no he completado mis días de seguro. Mando a mis tres hijos a la escuela y lo estoy pasando mal económicamente. Como los precios suben cada día, no hay un aumento de sueldo a cambio de nuestro trabajo. Mientras los ricos son cada vez más ricos, los pobres son cada vez más pobres. Ya no tenemos paz en casa. Discutimos todo el tiempo con nuestros hijos. No entienden ni aceptan la pobreza. Mientras que antes podíamos comprar una lata de aceite, harina y azúcar con nuestro salario diario, ahora no podemos comprar nada. No puedo satisfacer las necesidades de mi hogar con mi salario diario. Además, sólo podemos trabajar si hay algo. No trabajamos un mes entero".

No podemos mantener a nuestras familias

Vedat Fiktan dijo que lleva 15 años trabajando en la construcción. "Siempre he alquilado una casa. Llevo años trabajando, pero no tengo ahorros. Tengo 5 hijos y no puedo permitirme enviarlos a la escuela, porque nuestro salario diario no alcanza ni para mantener nuestra casa. Después de pagar el alquiler y las facturas, vivimos al borde del hambre".

Tres personas trabajando y todavía no es suficiente

Diciendo que lleva años trabajando en la construcción y que las condiciones laborales no son nada buenas, Alişer Akgün compartió lo siguiente: "Sólo salvamos el día con el salario diario que recibimos, no tenemos posibilidad de ahorrar dinero. Aunque tenemos tres personas trabajando en casa, no podemos ganarnos la vida. Antes, una persona podía mantener a una familia, pero ahora tres personas no pueden hacerlo".

No tenemos esperanza en el futuro

Tras señalar que lleva 15 años trabajando en este sector, siempre en una situación precaria, Servet Çelebi dijo: "Llevo muchos años trabajando, pero tengo cero ahorros. Tengo 6 hijos y todos van a la escuela. Recibimos 200 liras al día, pero ese dinero no soluciona ninguno de nuestros problemas. Esta crisis también afecta a nuestras relaciones en casa. Una lata de aceite cuesta casi mil liras. En invierno, si tenemos suerte, trabajamos dos semanas al mes. Esto hace que ganemos 3-4 mil liras al mes. Estamos en muy malas condiciones. Así que no tengo ninguna esperanza para el futuro".