El Partido Anticapitalista Francés (NPA) condenó las redadas y la detención de activistas kurdos llevadas a cabo por la policía en Marsella y París.
El comunicado señala: "Estas medidas policiales contra los representantes de un pueblo en lucha son inadmisibles.
Evidentemente, Macron y su gobierno están aplicando escrupulosamente las instrucciones del dictador Erdogan, más decidido que nunca a frenar cualquier resistencia organizada en Turquía o en cualquier otro lugar, por ejemplo decidiendo la disolución del HDP".
Las declaraciones subrayan el importante papel que desempeñan los kurdos en la lucha contra el ISIS y añaden: "El NPA protesta contra estas escandalosas medidas policiales y exige la liberación inmediata e incondicional de los activistas kurdos".