Manifestación por la libertad de Abdullah Öcalan en Berlín

La manifestación en Berlín a favor de la libertad de Öcalan ha tenido lugar en un clima de reivindicación a pesar de la fuerte presencia policial.

ÖCALAN

Una manifestación contra el confinamiento solitario de Abdullah Öcalan, que permanece cautivo en Imrali desde 1999, tuvo lugar en Berlín.

La acción, organizada por los movimientos juveniles TCŞ y TekoJIN, formaba parte de la campaña internacional «Libertad para Abdullah Öcalan y una solución política a la cuestión kurda». Las organizaciones exigieron la libertad física del líder del pueblo kurdo y criticaron a los gobiernos de los países occidentales por su silencio ante la injusticia de Imrali y su ambivalencia ante las violaciones de los derechos humanos y del derecho internacional cometidas por el Estado turco en el Kurdistán.

Los activistas de TCŞ dijeron: «Estamos en la calle contra 25 años de aislamiento, tortura y aislamiento. Abdullah Öcalan es el símbolo vivo de la lucha del pueblo kurdo por la libertad. Él es el camino hacia una solución no sólo para la cuestión kurda, sino para todos los pueblos de Oriente Medio. Sin embargo, el mundo lo ignora.

La Unión Europea, las Naciones Unidas y el Comité Europeo para la Prevención de la Tortura (CPT) guardan silencio sobre las condiciones inhumanas de aislamiento en Imrali. Pisotean sus propias leyes y hacen la vista gorda ante las flagrantes violaciones de derechos humanos de Turquía».

Los activistas continuaron: «Mientras se declara terrorista la legítima resistencia del pueblo kurdo, la política imperialista de Turquía se extiende por todo Oriente Próximo. No nos callamos ahora y no nos callaremos en el futuro. La libertad de Abdullah Öcalan es la clave de la justicia y la paz no sólo para el pueblo kurdo, sino también para toda la región.

Su liberación es más que una exigencia simbólica; es un requisito previo indispensable para establecer una paz auténtica en Oriente Próximo. Hay que poner fin inmediatamente a este régimen inhumano de aislamiento y liberar a Abdullah Öcalan. Hay que poner fin a la ocupación turca y a la política de exterminio contra el pueblo kurdo. Porque sabemos que la libertad de Öcalan es la libertad del pueblo kurdo».

La policía berlinesa estuvo presente en gran número y llamó repetidamente la atención con un comportamiento provocador a lo largo de la marcha. No obstante, el acto pudo llegar a su fin sin interrupciones. Tras la manifestación, los participantes realizaron una sentada para protestar por la detención de cuatro personas, que posteriormente fueron puestas en libertad.