Los kurdos y sus amigos se reunieron como todos los viernes desde el 9 de octubre en Nancy para protestar contra los ataques del Estado turco contra el norte y el este de Siria.

Los activistas llamaron la atención sobre el hecho de que el Estado turco está intentando llevar a cabo una limpieza étnica y una estructura demográfica de la región.

Los activistas también enfatizaron que los habitantes de la región, que pagaron un alto precio en la guerra contra el ISIS, se enfrentan ahora al peligro de nuevos ataques del ISIS, ya que la ocupación por el Estado turco está reactivando el Estado Islámico.

También se subrayó la importancia de la unidad nacional para el pueblo kurdo y los activistas pidieron a Kurdistán del Sur que aumentara el boicot contra el turismo y los productos turcos.