En el juicio contra Mehmet Çakas ante el Tribunal Regional Superior de Celle, la defensa pidió la absolución. El activista kurdo está acusado, según el artículo 129b del Código Penal alemán, de pertenecer a una organización terrorista extranjera, es decir, el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK). En su alegato de la semana pasada, la fiscalía exigió una pena de prisión de tres años y ocho meses.

Manifestación contra la criminalización antes del veredicto

El veredicto se espera para el miércoles 10 de abril. A partir de las 9:30 hora local hay organizada una manifestación bajo el lema “Libertad para Mehmet Çakas – Contra la criminalización de la búsqueda de la libertad”.

La audiencia del 3 de abril duró más de diez horas y contó con la asistencia de personas que se solidarizaron con el activista kurdo. Los abogados defensores exigieron la absolución de su cliente.

Los abogados justificaron su recurso diciendo que la valoración que hizo el Ministerio Público de las supuestas pruebas del delito fue "no sólo superficial, sino simplemente errónea. Es absurdo castigar a alguien por acciones legales completas basándose en que ejerció sus derechos fundamentales como ‘parte de una organización terrorista’".

Se acusa al movimiento kurdo.

En una declaración detallada publicada posteriormente, Mehmet Çakas explicó su propia vida en el contexto de la situación política de todos los kurdos y kurdas y explicó: “La acusación se centra en el movimiento kurdo y no en si actué ilegalmente en Alemania o no […]. La propia acusación demuestra que no se me acusa personalmente. Se acusa al movimiento kurdo".

El acusado expresó su sorpresa ante la similitud de las acusaciones hechas por Turquía y los países de la UE: "Desde que tengo uso de razón, he sido objeto de represión y violencia por parte del Estado turco. Debido a que resistí estas condiciones brutales, yo, como todos los demás, he sido llamado terrorista. Dado que hablar kurdo e incluso usar los colores amarillo, rojo y verde estaba prohibido en Turquía entonces (y todavía hoy), es posible que yo, como todos los kurdos y kurdas, haya violado en ocasiones las leyes turcas. Pero en Alemania, donde viví durante seis años no perturbé el orden social, no infringí ninguna ley y ni siquiera tiré basura al suelo. La acusación de ser terrorista aquí en Alemania me hizo pensar aún más. "

Este hombre de 44 años nació en la provincia kurda de Bingöl (Çewlîg) y sufrió la represión del Estado turco a una edad temprana. Se prohibió el idioma kurdo, el ejército turco incendió aldeas y muchas personas fueron expulsadas de sus hogares. Mehmet Çakas vio cómo asesinaron a su padre, y él mismo casi muere.

Noticias relacionadas: