Co-alcalde de Hakkari fue condenado a nueve años de prisión
Mehmet Sıddık Akış, co-alcalde electo de Hakkari, que fue encarcelado después de que se nombrara un fideicomisario en su lugar, fue condenado a nueve años de prisión.
Mehmet Sıddık Akış, co-alcalde electo de Hakkari, que fue encarcelado después de que se nombrara un fideicomisario en su lugar, fue condenado a nueve años de prisión.
El miércoles se celebró la audiencia final de la demanda interpuesta contra el co-alcalde electo de Hakkari, Mehmet Sıddık Akış, que fue sustituido por un fideicomisario y enviado a la prisión de Van. El co-alcalde, elegido democráticamente y destituido ilegalmente, está acusado de "cometer un delito en nombre de una organización ilegal sin ser miembro de la misma" y de "violar la Ley de reuniones y manifestaciones".
Akış asistió a la audiencia en el Tribunal Penal de Hakkari a través del Sistema de Información Audiovisual (SEGBİS). El fiscal afirmó en su dictamen final que Akış participó en marchas convocadas por una organización ilegal. Akış, por su parte, subrayó que el caso era político y que el objetivo principal de la investigación era nombrar un fideicomisario para Hakkari.
“El objetivo ya se ha logrado. La investigación y el procesamiento no tienen nada que ver con la ley. ¿Dónde está el delito en mis discursos del día del incidente? Hablo de paz y fraternidad en mis discursos. Estos han sido traducidos y ¿cuándo se ha convertido en delito decir estas cosas?”, preguntó.
Akış continuó su defensa de la siguiente manera: “¿Por qué nos volvemos separatistas cuando hablamos de unidad y solidaridad? Si cometo un delito cuando hablo de aislamiento, ¿por qué no se procesa a Bahçeli (líder del MHP) cuando dice: ´Hay que levantar el aislamiento´? Esto es un doble rasero. No debe haber aislamiento, guerra ni marginación. En el 101 aniversario de la fundación de la república, el presidente respondió: ´Marginaron y persiguieron´. ¿Por qué no es un delito cuando lo dice el jefe del Estado, pero sí cuando lo decimos nosotros? He ejercido mi derecho a criticar en mi discurso”.
Alkış destacó que el nombramiento de un fideicomisario es una usurpación de voluntad y denunció las prohibiciones de la gobernación a las reuniones y manifestaciones, mientras que sus abogados exigieron la absolución.
Al anunciar el veredicto, el tribunal condenó a Akış a siete años y seis meses por "cometer un delito en nombre de una organización ilegal sin ser miembro de la organización" y a un año y seis meses por "oponerse a la Ley de Reuniones y Manifestaciones".