El Comité de Relaciones Exteriores de la Unión de Comunidades del Kurdistán (KCK) emitió una declaración sobre las declaraciones del embajador turco en Bagdad que visitó el Kurdistán del Sur (norte de Irak) la semana pasada.
La declaración del Comité de Relaciones Exteriores de la KCK incluye lo siguiente
"Hace cuatro días, el embajador turco en Bagdad, Ali Rıza Güney, visitó Hewlêr [Erbil] y mantuvo conversaciones con Masrour Barzani y Massoud Barzani. Tras estas reuniones, un periodista preguntó al embajador turco por el asesinato de Nagihan Akarsel, miembro del Centro de Investigación Jineolojî
Jineolojî, el 4 de octubre.
El embajador turco en Bagdad, Ali Rıza Güney, haciendo caso omiso de las decenas de bases militares turcas en suelo iraquí y de la ocupación en curso, dijo al periodista: "Nos preocupamos más por la soberanía y la integridad territorial de Irak que por algunos elementos dentro de Irak."
Hablando de la reunión con los Barzani, el embajador turco también dijo: "Les hablé de nuestras expectativas en cuanto a la lucha contra los elementos del PKK". Al afirmar entonces que "los elementos orientados al PKK y afiliados al PKK son objetivos para nosotros", el embajador turco asumió la responsabilidad de los asesinatos cometidos en Sulaymaniyah y del reciente asesinato de Nagihan Akarsel.
Es un hecho conocido que el Estado turco tiene un historial muy sucio fuera de sus fronteras, desde el blanqueo de dinero hasta el tráfico de drogas, desde la trata de seres humanos hasta el asesinato, utilizando las instalaciones del Estado y los métodos de las bandas mafiosas, sin reconocer ninguna ley ni norma legal.
Como representante oficial de Turquía, el embajador turco en Bagdad ha asumido ahora la responsabilidad de este hecho conocido. Ha confesado los asesinatos cometidos por el Estado turco en Irak/Kurdistán del Sur y ha declarado temerariamente que seguirán cometiendo dichos asesinatos.
Esta declaración hecha después de la reunión con Barzanis es una declaración de no reconocer los derechos soberanos de Irak y el Kurdistán del Sur. Esto también demuestra que el estado turco no reconoce la Carta de la ONU y el derecho internacional.
La ONU, los gobiernos de Bagdad y Hewlêr, y todos los partidos políticos, especialmente el KDP, la PUK y el Gorran, deben tomar medidas inmediatas contra esta imprudencia y la confesión del estado mafioso. El parlamento, las organizaciones de la sociedad civil, los intelectuales y el pueblo del Kurdistán del Sur deben declarar persona non grata al embajador turco Ali Rıza Güney.
El silencio ante esta imprudencia y arrogancia sólo significará el apoyo a la República Turca, que quiere convertir el Kurdistán del Sur en el patio trasero de Turquía, y la complicidad con los crímenes de los sicarios turcos."