El Comité Ejecutivo de KESK, en un comunicado escrito sobre el proyecto del Canal de Estambul, recordó que el Presidente turco Recep Tayip Erdogan declaró que este se implementará a cualquier precio.
KESK subrayó los riesgos para el medio ambiente y las personas que conlleva la ejecución de dicho proyecto. "De lo que están hablando es de la destrucción de la presa Sazlıdere, que es uno de los recursos hídricos importantes de Estambul", dijo KESK, añadiendo: "Estamos hablando de la destrucción de áreas naturales y arqueológicas protegidas, parques naturales y nacionales. En la región, atravesada por tres líneas de falla activas, el riesgo de desastre aumenta a medida que los terremotos son más frecuentes. Este proyecto es una amenaza para la salud pública, así como para el medio ambiente".
"El Canal de Estambul tiene características que perturbarán y cambiarán el ecosistema. Este proyecto debería ser abandonado completamente, y las arcas de nuestros impuestos tendrían que destinarse a la salud pública, la educación, la protección de la naturaleza y los servicios públicos", continuó el comunicado.
"Nuestra Confederación no encuentra útil el proyecto del Canal de Estambul y continuará oponiéndose a él usando sus derechos democráticos para asegurar que no se implemente", concluyó.