Se ha levantado el bloqueo militar de la aldea kurda de Hespist (tr: Yarbaşı) en la provincia de Şırnak. Desde hace quince días, los habitantes de la aldea situada al noroeste del distrito de Idil se encuentran bajo el toque de queda impuesto por el ejército turco y está en vigor la prohibición de entrar en la aldea. La medida se basó en una reclasificación temporal de la zona como la llamada "zona especial de seguridad".

La medida se adoptó alegando que se habían avistado combatientes del PKK en el pueblo, donde posteriormente se lanzó una operación. Cualquiera que quisiera entrar o salir del pueblo por motivos de trabajo o por enfermedad era sometido a un control de antecedentes penales.

La operación en Hespist provocó pánico y miedo entre los residentes. Los soldados que participaron en la operación se apostaron en la iglesia de Mor Dodo del pueblo poco después de que comenzara el asedio y convirtieron los tejados de varias casas en puntos de observación. También se elevaron las posiciones de los francotiradores. Además, un hombre de Hespist que vivía en İdil fue arrestado en una redada y no fue puesto en libertad hasta después de varios días bajo custodia. El ejército también llevó a cabo registros domiciliarios en el propio Hespist.