Otro kolbar kurdo asesinado por fuerzas iraníes
Las fuerzas del régimen iraní continúan con sus ataques letales contra transportistas de carga fronterizos, en total impunidad.
Las fuerzas del régimen iraní continúan con sus ataques letales contra transportistas de carga fronterizos, en total impunidad.
Fuerzas iraníes llevaron a cabo un ataque en la frontera de Newsoud en el Kurdistán Oriental, matando a un kolbar kurdo llamado Muhammed Rehimi de Kermanshah.
Las fuerzas del régimen iraní mataron a 52 kolbers y hirieron a otros 131 en 2024.
Contexto
El Kurdistán Oriental se ha sumido aún más en la pobreza a lo largo de los años, debido a las políticas deliberadas del régimen iraní, transformandose en una de las regiones más pobres de Irán. En comparación con otras regiones, la zona ha experimentado una inversión significativamente menor y se ha frenado deliberadamente el desarrollo. No se permitió el desarrollo de la agricultura ni de la industria, y como resultado, el desempleo alcanzó su nivel más alto en Irán.
Frente a políticas de discriminación, opresión y empobrecimiento, llevar mercancías de contrabando no es una opción sino una necesidad para sobrevivir.
Kolbar proviene de las palabras kurdas "kol" (espalda) y "bar" (carga). Los kolbars se ganan la vida transportando cargas a lo largo de la peligrosa frontera. Sus cargas incluyen cigarrillos, teléfonos móviles, ropa, artículos para el hogar, té y, en raras ocasiones, alcohol. Caminan por terrenos peligrosos para realizar este comercio entre el Kurdistán del Sur y el Kurdistán Oriental. Las mercancías que traen se venden a precios elevados en Teherán, pero los kolbars que arriesgan su vida por ellas reciben una remuneración muy modesta.
Los intermediarios que reciben las entregas y buscan compradores en las ciudades se llaman kasibkars. Los kolbars y kasibkars tienen entre 13 y 70 años. Hay kolbars que sólo terminaron la primaria, y otros que incluso son graduados universitarios. Transportan cargas porque no encuentran otro empleo.
Según la Red de Derechos Humanos del Kurdistán, 51 kolbars kurdos fueron asesinados y otros 246 resultaron heridos por el régimen iraní en las regiones fronterizas de Urmia, Bane, Serdasht, Pawe y Kermanshan durante 2024.