Se ha levantado el bloqueo del pueblo de Timoq, en la provincia de Batman, que se ha dado a conocer por un escándalo de tortura en el que está implicada la gendarmería turca (policía militar). Desde el 31 de marzo, el gobernador turco había impuesto la prohibición de entrar y salir de la población. La medida fue precedida por una redada de la policía militar, que incluyó detenciones violentas. La acción se justificó por el “apoyo” a la guerrilla del PKK. Tres habitantes del pueblo, entre ellos un hombre de 80 años, están ahora detenidos por los habituales cargos de terrorismo. Dos de ellos habían sido torturados durante días por la gendarmería.

Una vez levantado el bloqueo a primera hora de la mañana del sábado, delegaciones del Partido Democrático de los Pueblos (HDP), del Colegio de Abogados de Batman y de la rama local de la Asociación de Derechos Humanos (IHD) se dirigieron a Timoq, cuyo nombre en turco es Gömüşörgü. Entre los miembros se encontraban Ayşe Acar Başaran, diputada y portavoz del Consejo de Mujeres del HDP, Songül Korkmaz, la destituida co-alcaldesa de Batman, su homóloga del municipio de Bekirhan, Gülistan Sönük, el activista y abogado de la IHD Devran Yıldız, y Erkan Şenses, presidente de la cámara en Batman. Las delegaciones mantuvieron conversaciones con los habitantes del pueblo sobre lo ocurrido durante la incursión a gran escala hace más de tres semanas con el fin de realizar investigaciones sobre lo ocurrido.

También realizaron entrevistas con los familiares de los aldeanos detenidos. Las operaciones militares que se están llevando a cabo en la región también fueron un tema de discusión. La operación llevada a cabo en las inmediaciones de la aldea se ha suspendido desde aquello. Sin embargo, las operaciones militares del ejército turco continúan en los pueblos más altos de Mişrîta (Yedibölük), Kêl Hezna (Kel Hasan) y Elqîs (Belkıs). Las consecuencias para la población local son devastadoras en algunos casos. El ganado no puede pastar y la tierra no puede ser cultivada. La libertad de movimiento de la gente está muy restringida, y los toques de queda, que en algunos casos duran varias semanas, no son infrecuentes. La IHD ha anunciado que pronto presentará un informe completo sobre los acontecimientos en Timoq y la región.