Durante los ataques de ISIS en 2014, HPG, YPG/YPJ y YBŞ abrieron y defendieron un corredor humanitario de Shengal a Rojava. Más de cien mil civiles fueron salvados de la masacre de ISIS. Mientras los civiles eran evacuados, también se transportaban alimentos, medicinas y otros artículos de primera necesidad a la región a través de este corredor.
El gobierno iraquí cerró el corredor humanitario el 15 de diciembre de 2018 sin dar razón alguna. La gente de Shengal protestó durante días en la frontera. Después de las acciones, se celebraron reuniones entre los responsables de la toma de decisiones de la región de Shengal y el gobierno iraquí, pero hasta ahora no se ha encontrado ninguna solución.
Ayer, cientos de habitantes de Shengal se desplazaron a la frontera con Rojava. Hicieron un llamamiento al gobierno iraquí para que reabra el corredor humanitario hacia Rojava. Soldados iraquíes intentaron detener la manifestación. Los activistas lograron imponerse, a pesar de que los soldados dispararon al aire.
El llamamiento para la apertura de un corredor humanitario tiene por objeto, por una parte, proporcionar suministros a Shengal y, por otra, hacer posible el regreso de los refugiados al campo de Newroz en Rojava. Los agentes fronterizos prometieron a los manifestantes abrir la frontera en los próximos días.
El jefe de Seguridad Nacional en Shengal, Neqib Nuhad, dijo: "Las manifestaciones para abrir la frontera se han venido realizando desde hace bastante tiempo. El autogobierno del norte y el este de Siria ha hecho los preparativos necesarios a este respecto. La frontera se abrirá en los próximos días".