La Asamblea de Seguridad y Salud de los Trabajadores (ISIG) ha hecho público su informe anual sobre los accidentes mortales relacionados con el trabajo. Según el informe, al menos 2.170 trabajadores murieron en el trabajo el año pasado. 1864 de ellos eran trabajadores asalariados y 306 eran trabajadores autónomos.

El informe reveló que 345 trabajadores perdieron la vida en los ámbitos del comercio, la oficina, la educación y el cine, 318 trabajadores en la agricultura y la silvicultura, 335 trabajadores en la construcción y la construcción de carreteras y 229 trabajadores en los servicios sanitarios y sociales.

Según el informe, 625 trabajadores perdieron la vida a causa de la pandemia, 342 murieron en accidentes de tráfico y 269 quedaron sepultados entre los escombros.

Entre las víctimas de las muertes en el lugar de trabajo había 165 mujeres y 2.005 hombres. Entre ellos había 21 niños menores de 14 años y 94 refugiados.

Según el informe, 2.048 personas que perdieron la vida no estaban afiliadas a ningún sindicato, mientras que sólo 122 de ellas estaban sindicadas.

La mayoría de las muertes relacionadas con el trabajo tuvieron lugar en las grandes ciudades. Así, 260 trabajadores murieron en Estambul, 102 en Esmirna, 99 en Kocaeli, 73 en Bursa, 72 en Antalya y 19 en Diyarbakir.

Las ciudades con menor número de muertes son las siguientes: Ağrı, Hakkari, Siirt, Batman, Niğde y Yozgat.

2.427 trabajadores perdieron la vida en Turquía en 2020, 1.736 trabajadores en 2019 y 1.923 trabajadores en 2018, según el ISIG.