Las protestas tras el asesinato de Jina Amini por la policía de la moral iraní no han cesado durante 40 días. Muchas ciudades del Kurdistán Oriental o Rojhilat y de Irán están en revuelta liderada por mujeres bajo el lema “Jin, Jiyan, Azadî” (“mujer, vida, libertad”).
El Partido por una Vida Libre en el Kurdistán (PJAK) y el Movimiento Kurdo Oriental por la Libertad y la Democracia (KODAR) propusieron recientemente una hoja de ruta para resolver la crisis en Irán y el Kurdistán Oriental. En declaraciones a ANF, la co-presidenta del PJAK, Zîlan Vejîn, destacó que las soluciones que proponen corresponden a las demandas de la población rebelde de Irán y del Kurdistán Oriental, especialmente de las mujeres.
Han pasado 40 días desde el asesinato de Jina Amini. Las protestas se han convertido en un levantamiento en el Kurdistán Oriental e Irán. ¿Por qué Jina Amini en particular se convirtió en el catalizador de la resistencia colectiva en todo Irán?
En primer lugar, hay que señalar que, tras la Revolución Islámica de 1979, los pueblos de Irán siempre se han rebelado contra las políticas, los conceptos políticos y el sistema del régimen actual. Esto se aplica en particular a la política en relación con las mujeres, la sociedad y los pueblos. El enfado por el trato que el régimen actual da a las mujeres, la sociedad y los pueblos siempre ha sido grande, y la demanda de cambio siempre ha estado viva. Sin embargo, las demandas de las mujeres y los pueblos por la libertad, la igualdad y la democracia siempre han sido respondidas por el régimen actual con violencia, opresión e inhumanidad. La legislación actual niega a las mujeres cualquier derecho. La realidad del Estado y del régimen se basa en la esclavitud absoluta de las mujeres. Las mujeres están en prisión. Por supuesto, toda la sociedad y los pueblos están también en prisión con ellas. Este sistema patriarcal, reaccionario, sexista y religioso, basado en la esclavitud absoluta de las mujeres, acaba por encarcelar a toda la sociedad en la esclavitud.
Así que lo que se expresa a través de Jina es la demanda de libertad, igualdad, democracia y justicia para todos los pueblos de Irán. En Irán, los kurdos, los árabes, los baluchis y los azeríes, en definitiva, todos los grupos y pueblos étnicos y religiosos son negados, ignorados. Sus legítimas reivindicaciones son respondidas con violencia. En este sentido, las mujeres se identifican más con Jina, pero la población en general, liderada por las mujeres, exige un futuro libre a través de la persona de Jina. Porque en un país donde las mujeres no son libres, nadie es libre. Por lo tanto, la priorización de la libertad de las mujeres y el hecho de que todos los pueblos de Irán vean su futuro libre en la libertad de las mujeres con el lema “Jin, Jiyan, Azadî” tiene un gran significado y profundidad. Sobre esta base, la libertad de las mujeres dará forma a la libertad de todo el país y determinará su futuro. El espíritu creado por Jina es el espíritu de una resistencia liderada por mujeres para la libertad y la igualdad de los pueblos de Irán. Manifiesta la profundidad histórica de la resistencia. Se trata de reflexionar sobre las propias raíces históricas, la propia naturaleza y el vínculo con la mujer. El objetivo es construir una sociedad libre basada en mujeres libres.
Otro aspecto importante a tener en cuenta es, por supuesto, que Jina era kurda y el centro de las manifestaciones estaba en el Kurdistán. El serhildan (levantamiento) comenzó en el Kurdistán, pero Teherán, Tabriz, Baluchistán y Ahwaz recogieron la voz del Kurdistán. En este sentido, el Kurdistán iraní es un foco para todos los demás pueblos iraníes. Por ello, el serhildan impulsado por las mujeres y el pueblo kurdos se ha extendido a muchas ciudades, especialmente en la capital, Teherán, y continúa. El papel del Kurdistán es importante. Hay que ver qué fuente de fuerza, moral y motivación es el Kurdistán. Sin duda, este aspecto podría evaluarse de forma más exhaustiva, pero en resumen, esto es lo que puedo decir.
¿Por qué juega un papel tan importante el lema “Jin, Jiyan, Azadî”? ¿Cuál es su influencia en los pueblos de Irán?
Hay que ver que todos los implicados en el serhildan se han unido bajo esta consigna sin preguntar ni cuestionar. Durante años, la población y las mujeres de Irán han buscado una fórmula para salir de la situación actual. En este sentido, el lema “Jin, Jiyan, Azadî” se convirtió en una expresión del tipo de futuro al que aspiran todos los pueblos de Irán y especialmente las mujeres. La frase “Jin, Jiyan, Azadî” es también una expresión de una cultura, una lengua y una historia social comunes de la familia lingüística indoeuropea. Por lo tanto, bajo este lema, todas las personas de todas las edades de Irán y Rojhilat se han unido y levantado. Porque en Irán no hay mujeres, no hay vida y no hay libertad. Ahora, primero, se reconoce la identidad y la existencia de las mujeres sobre la base de los principios de libertad e igualdad, luego se construye la vida en torno a estos principios y a la realidad de las mujeres, y la libertad se realiza finalmente con la formación de estos principios.
Sin embargo, también ha habido ataques e intentos de distorsionar el lema “Jin, Jiyan, Azadî” y la realidad ideológica y filosófica en la que se basa. Hay planteamientos y actividades de propaganda que pretenden despojar al lema de su esencia. Algunas fuerzas que se definen a sí mismos como alternativos y de oposición al régimen iraní, también atacan la frase “Jin, Jiyan, Azadî” y tratan de distorsionar su esencia. Combatir a estas fuerzas es una tarea importante para cualquiera que crea en la filosofía y la verdad ideológica de “Jin, Jiyan, Azadî”. Por lo tanto, es necesario referirse siempre a esta fuente y expresar y comprender correctamente la realidad filosófica e ideológica en la que se basa. Con el lema y el concepto de “Jin, Jîyan, Azadî”, Rêber Apo [Abdullah Öcalan] creó el movimiento de libertad de las mujeres kurdas y la realidad de las mujeres combatientes. Hizo de ellas la base filosófica e ideológica y la fuente del movimiento de las mujeres.
Por supuesto, Rêber Apo fue el primero en expresar este lema como una “fórmula mágica”. Durante 50 años, ha dado forma, diseñado y estructurado tanto el movimiento de liberación kurdo como el movimiento de liberación de la mujer en las cuatro partes del Kurdistán con este enfoque filosófico e ideológico. La esencia del paradigma para construir una sociedad ecológica de base y democrática basada en la liberación de la mujer se manifiesta en el lema “Jin, Jiyan, Azadî”. Por lo tanto, es la clave para resolver todos los problemas sociales, económicos, ecológicos, militares y políticos que la modernidad capitalista y las estructuras del Estado-nación han creado. Es la brújula y la guía para todos los que buscan una salida a estos problemas. Por eso es aceptado y utilizado por todos. El 24 de junio de 2013, Rêber Apo instó a las activistas del movimiento por la libertad de las mujeres kurdas, diciendo: “Debéis seguir enseñando y estableciendo la fórmula mágica ‘Jin, Jiyan, Azadî’”. Les encomendó la tarea de basarse en esta fórmula y difundirla por todo el Kurdistán, para extenderla en Oriente Medio y en el mundo. El movimiento por la libertad de las mujeres en Rojhilat, dirigido por la Comunidad de Mujeres Libres del Kurdistán Oriental (KJAR), se basa en esta realidad ideológica y filosófica. El régimen iraní no es la primera vez que escucha esta consigna. Nuestra camarada Şirin Alamhouli fue la primera en escribir el lema “Jin, Jiyan, Azadî” en la pared de una prisión iraní. Este lema conduce al camino de la libertad.
En conclusión, me gustaría decir que la lucha de las mujeres kurdas contra el sexismo, el nacionalismo y el fundamentalismo tiene un gran impacto en la incipiente lucha por la liberación de la mujer en el mundo e inspira a las mujeres del mundo. En este sentido, la lucha de las mujeres kurdas se convierte en universal.