2019: Un mal año para la libertad de expresión, dice Susma

La Plataforma Susma (No Te Quedes Callado) publica un informe que cubre los casos de censura en las artes y los medios de comunicación durante los primeros 10 meses de 2019 (enero-octubre)

Es el tercer informe de este tipo preparado por la Plataforma Susma en un esfuerzo por construir una memoria colectiva sobre las violaciones de la libertad de expresión.

Según los casos documentados por Susma, estos fueron los métodos de censura/autocensura y represión más utilizados durante el año 2019: arrestos y enjuiciamiento de periodistas; sanciones en forma de bloqueo del acceso a los contenidos de las noticias en red, suspensión temporal de la emisión y multas administrativas; programas que se retiran del aire; despidos de periodistas; bloqueo de los medios de comunicación sobre personas y noticias consideradas "objetables" y autocensura en forma de retirada de declaraciones de instituciones públicas o de noticias que contradigan las políticas del gobierno; censura de escenas de programas en canales de televisión o plataformas en red por motivos de sexualidad, violencia o violación de los valores familiares (relación entre personas del mismo sexo).

Desde los primeros días de 2019, decenas de periodistas fueron allanados, arrestados e incluso encarcelados por sus reportajes.

Los cargos que se utilizaron con mayor frecuencia contra los periodistas han sido "pertenencia a una organización terrorista", "difundir propaganda de una organización terrorista", "insultar al presidente", "insultar a los funcionarios del Estado", y delitos que comúnmente se denominan "insultar a la turquedad".

Muchos periodistas que compartían puestos o publicaban informes críticos con la "Operación Primavera de la Paz", es decir, el ataque de invasión a Rojava iniciado por el gobierno turco el 9 de octubre, fueron arrestados en redadas en sus casas.

Según un comunicado del Ministerio del Interior, 186 personas fueron detenidas, 24 de las cuales fueron encarceladas en espera de juicio, por publicar o comentar los ataques de la invasión a Rojava.

Censura y prohibiciones en la industria editorial 

Para la industria editorial, 2019 fue un año marcado por la censura y las prohibiciones. Por un lado, las administraciones penitenciarias impidieron a los reclusos acceder a un número cada vez mayor de libros, se confiscaron ejemplares de libros publicados hace muchos años con el pretexto de "difundir la propaganda terrorista" y se detuvo a los propietarios de las editoriales por sus publicaciones en las redes sociales.

Por otra parte, el mundo literario también utilizó sus propios medios, y las revistas y las editoriales practicaron la censura y la autocensura en varias ocasiones.

Censurada la palabra "Kurdistán" 

La palabra "Kurdistán" fue censurada en la traducción al turco de los Once Minutos de Paulo Coelho en todas sus reimpresiones desde 2004.

Asimismo, la palabra "Kurdistán" incluida en la versión original del Seyahatname (Libro de Viajes) del explorador otomano del siglo XVII Evliya Çelebi fue sustituida por la frase "tierra kurda" en una edición de 2006 del libro publicado por Yapı Kredi.