Amargi es de Kobane. Se unió a las filas de la resistencia en 2011 y luchó en varios frentes en Rojava. Ahora está llevando la pelea contra ISIS en Raqqa.

Cuando Amargi sintió la responsabilidad de tomar las armas como una mujer kurda fue 2011. YPG y YPJ ni siquiera existían entonces. Nació en una familia con una tradición de resistencia. Sus tres hermanos están entre las filas de las Fuerzas Democráticas Sirias.

Amargi perdió un hermano y un primo durante la resistencia de Kobanê contra ISIS. Por lo tanto ella está furiosa cuando está luchando contra ISIS. Siempre en la primera línea de combate y entre las mujeres más valientes que llevan la lucha ofensiva contra ISIS, que es notoria por su barbarie y crueldad.

"Las mujeres desarrollan conciencia sobre la libertad durante la lucha. Luchar en Raqqa exige una voluntad muy fuerte. En Kobane, ellos (ISIS) querían destruir la voluntad de las personas y especialmente de las mujeres. Querían destruir todo. En Alepo, Minbic, Kobane y en todo el norte de Siria estaban planeando destruir vidas. Pero de Kobane a Raqqa nos pusimos en contra y estamos ganando paso a paso", dijo la combatiente.

Amargi dijo que las mujeres sólo pueden ser libres si luchan y resisten y con esta conciencia luchan las mujeres en Raqqa y en otras partes de Siria del Norte.

"Vamos a anunciar buenas noticias de la liberación de Raqqa en un futuro próximo", concluyó Amargi.