Hace 31 años, el 25 de octubre de 1992, la comandante guerrillera Bêrîtan Hêvî (Gülnaz Karataş) cayó mártir en el Kurdistán iraquí (Kurdistán “Sur” o “Bashur”).
La denominada Guerra del Sur, en la que murió Bêrîtan, estalló tras la proclamación de la Región Autónoma del Kurdistán, en el norte de Irak, el 4 de octubre de 1992. Cuando los actores regionales y mundiales, sobre todo el Estado turco, dieron luz verde a un sistema federal, los partidos kurdos del sur, la Unión Patriótica del Kurdistán (PUK) y el Partido Demócrata del Kurdistán (KDP), exigieron a cambio una guerra conjunta contra el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK). En consecuencia, las propias fuerzas del Kurdistán Sur entraron en guerra junto al ejército turco contra la guerrilla del PKK. El objetivo era expulsar a los guerrilleros y guerrilleras principalmente de las regiones de Heftanin, Zap y Xakurke.
Rodeada por combatientes peshmerga del KDP en Xakurke, Bêrîtan rechazó los llamamientos a la rendición. Luchó hasta su última bala, destruyó su arma y saltó a la muerte desde una roca para evitar ser capturada. Su acción se ha considerado desde entonces un ejemplo de la determinación de las mujeres kurdas contra la traición y la rendición.
Poco después de la muerte de Bêrîtan, se dieron los primeros pasos hacia la creación de un ejército femenino. Hoy, las Unidades de Mujeres Libres (YJA Star) desempeñan un papel destacado en la lucha guerrillera en el Kurdistán.
Desde ANF hemos hablado con tres guerrilleras de las YJA Star sobre lo que tienen en común con Bêrîtan y su resistencia.
Arjîn Roj: “Heval Bêrîtan se negó a rendirse”
La guerrillera Arjîn Roj dijo que la guerra de 1992 estalló a causa de los ataques del KDP y la PUK, y se basó en la traición.
"Esta guerra duró cuarenta días. Había líderes guerrilleras. Heval Bêrîtan tenía una posición especial en aquella época. Luchó como una comandante porque conocía y comprendía la ideología de Rêber Apo [Abdullah Öcalan]. Heval Bêrîtan nunca lo conoció, pero leyó mucho e interiorizó su ideología. Sabía lo que significaba la voluntad de las mujeres libres. Su personalidad no permitía la rendición. Cuando le pidieron que se rindiera, saltó desde una roca. No aceptaba la traición ni la rendición.
Las YJA Star se fundaron sobre la línea de batalla de amigas como Bêrîtan, Sema, Zîlan y Gulan. Las asociaciones de mujeres se crearon con la intención de que el valor y las capacidades de las mujeres nunca quedaran a la sombra de los hombres. Delal, Bêrîtan, Azê, Çavrê y Gulan se convirtieron en símbolos de la resistencia de las mujeres libres. Las mujeres que se unen a nosotras desde distintos lugares del mundo también encuentran su libertad en esta línea. Vienen a nosotras basadas en la filosofía de Rêber Apo. Las YJA Star existen desde hace treinta años. Nuestra lucha de hoy se basa en este legado".
Barîn Nûjîn: “Bêrîtan simboliza las YJA Star”
Barîn Nûjîn dijo: "Heval Bêrîtan fue nuestra figura principal. Gracias a ella se fundaron las unidades de mujeres. Fue una líder y comandante en la vida, la amistad y la guerra, siempre centrada en la liberación de la mujer. Cuando ella cayó, se fundaron las unidades de mujeres libres. Para nosotras, ella es una figura simbólica que nos da fuerza en la vida. Su vida nos da fuerza.
Delal Amed, Ronahî, Zîlan y muchas otras, cuyos nombres ni siquiera puedo enumerar, fueron también nuestras figuras destacadas. Gracias a ellas, ha surgido una postura firme. Sacamos nuestra fuerza y nuestra convicción de la filosofía de Rêber Apo. Como organizaciones de mujeres, con esta filosofía tenemos una postura fuerte tanto en la vida como en la guerra. Heval Bêrîtan tenía esta actitud. La tomamos como ejemplo".
Dunya Havîn: “Para que no gane la línea de la traición”
La guerrillera Dunya Havîn dijo: "La guerra de 1992 se hizo a traición y contra la voluntad de las mujeres y los logros del pueblo kurdo. Heval Bêrîtan se ocupó de la filosofía de Rêber Apo.
Adoptó una postura para que no ganara la línea de la traición. Cuando le pidieron que se rindiera y le hicieron falsas promesas, se negó. No aceptó que los kurdos traicionaran a los kurdos. No se rindió. Como no quería que su arma cayera en manos de los traidores, la besó y la destruyó antes de saltar. Con esta fuerza de voluntad y esta convicción, haremos valer también la libertad física de Rêber Apo".
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