El martes se llevaron a cabo operaciones de genocidio político en varias ciudades, incluida Amed (Diyarbakir), como parte de una investigación con sede en Ankara. 18 mujeres fueron detenidas durante la investigación, en la que 50 activistas del Movimiento de Mujeres Libres Kurdas (TJA) enfrentan una orden de arresto. El jueves por la noche, las miembros del TJA detenidas en Amed y otras ciudades fueron trasladadas a Ankara. Se informa que la policía de Ankara torturó a miembros de la TJA a la entrada de la ciudad antes de trasladarlos a una comisaría.

A las detenidas no se les dio comida ni agua

Según informes, a las mujeres detenidas no se les dio comida ni agua durante un día y medio, y que sólo podían beber agua en la comisaría de policía de Ankara por la noche. La policía de Ankara esposó a todas las mujeres por la espalda. Figen Ekti fue objeto de violencia por parte de 4 policías cuando se resistió a que la esposaran por la espalda, y todas las mujeres detenidas fueron objeto de insultos.

Una de las detenidas es una mujer enferma de cáncer

El informe indicó también que todas las mujeres detenidas fueron puestas en régimen de aislamiento después de haberlas hecho esperar frente a la pared. Aunque el fiscal instructor fue informado de una fisura en el cráneo de Figen Aras, una de las mujeres detenidas, a causa de un accidente de tráfico anterior, no se tuvo en cuenta su estado de salud. Además, aunque Aras le dijo a la policía que ciertamente debía evitar recibir un golpe en la cabeza debido a su enfermedad de vértigo, los policías la golpearon deliberadamente en la cabeza.

Entre las mujeres detenidas también hay una mujer enferma de cáncer que recibe tratamiento de quimioterapia.

Los informes dicen que la policía de Ankara obligó a las mujeres detenidas a proporcionar información bajo la apariencia de "charlas amistosas".