Los ataques de invasión del Estado turco contra el noreste de Siria y Shengal también fueron objeto de protestas por los activistas que condenaron la guerra y las políticas de masacre implementadas por el presidente turco Recep Tayyip Erdogan y el presidente de los EE.UU. Donald Trump, que se unirá a la Foro Económico Mundial en Davos.

Los refugiados e inmigrantes turcos y del Kurdistán marcharon junto con activistas y organizaciones suizas exigiendo el fin de la guerra y protestando contra la venta de armas a Turquía.

Los activistas corearon consignas y escribieron graffitis anticapitalistas en las ventanas de tiendas y bancos.