Alemania había sido durante mucho tiempo un país de refugio para las víctimas de la guerra en el Kurdistán y las personas sometidas a la tiranía de los estados colonialistas en la región, pero esto cambió en los últimos años. 

Según los datos de la Oficina Federal de Migración y Refugiados (BAMF) que manejan las solicitudes de asilo en Alemania, en los primeros cuatro meses de 2019, las posibilidades de los solicitantes de asilo que se autoidentifican como kurdos tuvieron un 5,9% de posibilidades de aprobación, mientras que el número fue del 81% para aquellos que se identificaron como turcos.

El diario alemán Süddeutsche Zeitung publicó un artículo que comparó los datos de BAMF de 2018 y 2019. Los datos muestran que la brecha entre kurdos y turcos está creciendo: los turcos tuvieron una tasa de aprobación de asilo del 77% el año pasado, mientras que el número fue de 7% para los kurdos. Se aprobaron un total de 759 solicitudes de asilo a personas turcas.

Ahora los turcos piden más asilo que los kurdos

El número de kurdos que buscan asilo ha disminuido, mientras que el de los turcos han aumentado. De hecho, en 2018 había más solicitantes de asilo turcos que kurdos. El año pasado, un total de 5.776 turcos solicitaron asilo en Alemania, mientras que el número de kurdos fue de 4.067. El verdadero punto de ruptura en este cambio se debe al presunto intento de golpe de Estado contra el gobierno de Erdogan el 15 de julio de 2016.

A raíz de ese hecho y el posterior OHAL (Estado de Emergencia), muchos miembros del Movimiento Gülen y personas despedidas de los Decretos Estatales del Estado de Emergencia (KHK) buscaron asilo en Alemania. La mayor alza en el número de solicitantes de asilo kurdos fue en 2016, cuando 4.383 kurdos y 1.197 turcos solicitaron asilo. La razón de este aumento fue la guerra del ejército turco contra las ciudades kurdas durante la resistencia del gobierno autónomo en el norte del Kurdistán.