El martes por la noche, el músico callejero kurdo Cihan Aymaz, de 30 años de edad, fue asesinado en plena calle en Estambul-Kadıköy por un fascista turco. Mehmet Caymaz, el presunto asesino, habría pedido al músico que cantara la canción nacionalista y racista "Ölürüm Türkiyem" (“Muero por ti, Turquía”). Aymaz probablemente se negó, y entonces el agresor apuñaló e hirió mortalmente al músico, quien murió en el hospital. El agresor fue detenido.

El miércoles, muchas personas se concentraron en el lugar de los hechos para conmemorar a Aymaz. La Alianza por el Trabajo y la Libertad organizó allí una concentración, a la que también asistieron varios familiares de Aymaz. En una pancarta se leía: "Queremos una vida en la que no se mate a los artistas callejeros" y, en otra: "Derribaremos este orden asesino". La gente gritaba consignas como "Exigimos responsabilidades por Cihan", "Viva la hermandad de los pueblos", "Hombro con hombro contra el fascismo" y "Libertad para el arte, libertad para los artistas".

Aymaz procedía de la ciudad kurda septentrional de Qers (tr. Kars) y era empleado del Partido Democrático de los Pueblos (HDP). Había sido interrogado unos días antes por una canción de protesta contra Erdoğan.

Destruiremos esta mentalidad fascista y monista.

El co-presidente del Partido de la Izquierda Verde (YSP) del distrito de Kadıköy, Koray Türkay, culpó en parte del asesinato a la actitud monista de los regímenes turcos de los últimos 40 años: "Cihan fue arrancado de entre nosotros y nosotras. Era un músico callejero. Era un amigo al que todo el mundo conocía por sus canciones kurdas, especialmente aquí en Kadıköy. Era alguien que hizo posible que escucháramos música kurda en la calle. En ese sentido, fue alguien que desafió la autoimagen monista [del nacionalismo turco del régimen del AKP/MHP]. Cihan nunca se doblegó y nosotros y nosotras tampoco lo haremos. Destruiremos esta mentalidad fascista y monista. Exigiremos responsabilidades por el sufrimiento y las masacres".

Esta política está costando la vida a los jóvenes.

Özlem Özdemir leyó una declaración en nombre de la Alianza por el Trabajo y la Libertad. Decía: "Según testigos presenciales, ayer, cuando Aymaz estaba tocando música, una persona llamada Mehmet Caymaz se le acercó y le pidió que cantara la canción 'Ölürüm Türkiyem'. Cuando Cihan Aymaz, que lleva años actuando como músico callejero en Kadıköy y suele cantar canciones kurdas, se negó a cantar esta canción, que es un símbolo de la actitud monista y del fascismo de Turquía, estalló una discusión y el asesino sacó un cuchillo que ya tenía preparado en el bolsillo. Mató a Cihan apuñalándole en el corazón. Condenamos este cruel crimen. Es la expresión de la política del gobierno, basada en el odio. Esta política está costando la vida a los jóvenes.

El gobierno quiere controlar las artes y a los y las artistas. Impide a los músicos actuar en los escenarios y criminaliza y persigue a los artistas que intentan actuar en la calle. Declaramos que estamos con todos y todas los artistas. Ofrecemos nuestras condolencias a la familia de nuestro músico y amigo. Las artes seguirán floreciendo. Intensificaremos la lucha hasta que las melodías de todas las lenguas y culturas se toquen y canten libremente en estas calles y plazas."

Estamos enfadados y queremos justicia.

Mehmet Günhan, primo de Aymaz, declaró: "Habría mucho que decir, pero quiero expresar lo siguiente: emigramos a la metrópoli para encontrar trabajo y pan. Pero aquí vemos morir a nuestros jóvenes, uno tras otro. O son asesinados por el sistema o mueren en el trabajo. Estamos enfadados y queremos justicia. En un lugar como Kadıköy, hay gente paseando con cuchillos y te pueden matar muy fácilmente. ¿No hay seguridad aquí? Los agresores creen que, de todos modos, no les condenarán a una pena alta. Por lo tanto, piensan que pueden matar a la gente así como así. La gente no debería tomarse la justicia por su mano. Creemos en la democracia y no dejaremos pasar este asunto".

La policía quiere silenciar a los familiares

Cuando el tío de Aymaz, Ibrahim Rıfatoğlu, declaró que Cihan fue asesinado por fuerzas paramilitares debido a su identidad y a la canción kurda que cantaba, la policía intentó cortarle el paso y declaró ilegal su declaración. La multitud protestó enérgicamente contra la intervención policial.

Tras la concentración, los participantes depositaron claveles en el lugar del asesinato.