Ataque racista mata a un ciudadano kurdo en la provincia de Konya
Un grupo racista de 60 personas atacó a una familia kurda en el distrito Meram de Konya. Hakim Dal (43) murió en el ataque.
Un grupo racista de 60 personas atacó a una familia kurda en el distrito Meram de Konya. Hakim Dal (43) murió en el ataque.
Según la agencia de noticias Mezopotamya (MA), una familia kurda de Amed (Diyarbakır), que ha estado residiendo en Çarıklıköy en el distrito de Meram de Konya durante 20 años, ha sido blanco de un ataque racista en el que al menos 60 personas los atacaron con armas. Uno de los miembros de la familia, Hakim Dal (43) murió en el ataque. Se informa de que racistas que viven en Karahüyük habían amenazado a la familia varias veces antes.
"Nos atacaron porque somos kurdos"
El hermano de la víctima, Hamdi Dal, dijo que el ataque se produjo porque eran kurdos: “No nos querían porque somos kurdos. Nos decían 'Venderás estos lugares y te irás'. Las personas que vivían en los pueblos de los alrededores también nos estaban presionando, querían que nos fuéramos. Nos habían amenazado de vez en cuando antes. Una discusión comenzó por la noche entre los pastores que estaban pastando animales en una tierra vacía en nuestro pueblo. Después de la discusión, un grupo de al menos 60 personas llegó de Karahüyük con armas en la mano. Éramos tres personas y nos atacaron porque éramos kurdos, citando la discusión como excusa. Mi hermano murió en el ataque”.
"Atacantes instigados por el jefe de la aldea"
El testigo Mehmet Emin señaló que “la familia se gana la vida con la cría de animales. Han vivido en este pueblo durante mucho tiempo. Ha habido al menos tres intentos de atacarlos antes. El jefe de la aldea estaba provocando a los aldeanos contra la familia. El es el instigador. Ha sido detenido. Nadie ha sido detenido más que él".
El 12 de julio, un grupo racista que vivía en el mismo barrio había atacado a una familia kurda en el barrio de Bahçeşehir en el distrito de Meram de Konya. El grupo racista atacó e hirió gravemente a una familia de siete, de los cuales cuatro eran mujeres. El grupo racista dijo: “Somos nacionalistas, no te dejaremos vivir aquí” mientras los atacaban.