Los ataques racistas contra el partido político Die Linke en Bremen, Alemania, han aumentando gradualmente, siendo el último acto una carta sospechosa enviada a la oficina de diputados del partido.

En mayo pasado, en las elecciones en Bremen, Die Linke ganó el 11 por ciento de los votos. En el parlamento, Die Linke se unió al gobierno de coalición formado por el SPD y el Partido Verde. Los ataques racistas contra Die Linke han aumentado progresivamente desde la primera acción registrada en 2017.

Los ataques muchas veces culminaron en la ruptura de vidrios en las ventanas de la oficina del partido se rompan varias veces, pero también amenazas a diversos diputados, especialmente a través de las redes sociales. 

El 2 de enero, grupos de extrema derecha rompieron las ventanas de la oficina de diputados de Die Linke. Como resultado del ataque, un hombre de 49 años fue detenido.

La última acción fue una carta sospechosa enviada a la oficina de diputados en Neustadt. Las unidades de seguridad estaban en alerta por sospechas de que la carta pueda contener sustancias tóxicas. Finalmente, se estableció que la carta contenía polvo no peligroso.

Die Linke condenó enérgicamente este último ataque. La diputada Olaf Zimmer y la presidenta del grupo, Sofía Leonidakis, dijeron que los crecientes ataques mostraron las peligrosas dimensiones del racismo. Las políticas dijeron que los ataques no los intimidarían.