Bagdad condena el ataque iraní a Hewlêr y convoca a su embajador en Teherán

El gobierno iraquí condenó el ataque iraní a Hewlêr y convocó a consultas a su embajador en Teherán.

La Guardia Revolucionaria iraní bombardeó zonas residenciales civiles en Hewlêr (Erbil) la noche del 15 de enero, matando a 4 personas e hiriendo a otras 16.

La presidencia de la región del Kurdistán emitió una declaración que decía: "Condenamos enérgicamente el ataque hostil de los Guardias Revolucionarios iraníes contra Hewlêr anoche, que provocó muchos civiles muertos y heridas. Expresamos nuestras condolencias a las familias de los mártires y deseamos un pronta recuperación a los heridos".

Al definir el ataque como un crimen contra el derecho internacional, la vecindad y los valores humanitarios, la presidencia de la región del Kurdistán añadió: "El pretexto de los Guardias Revolucionarios iraníes para el ataque es completamente infundado y falso".

Irán afirmó que los misiles destruyeron "un cuartel general" donde operaban los servicios de inteligencia israelíes.

En una declaración posterior al ataque, el Ministerio de Asuntos Exteriores iraquí condenó “el ataque contra la soberanía de Irak y la seguridad de su pueblo”.

Irak convocó al encargado de negocios iraní para entregar una "carta de protesta" y a su embajador en Teherán "para consultas".

Según diplomáticos iraquíes, el gobierno ordenó la creación de una comisión de investigación para demostrar "la falsedad de las acusaciones formuladas por los responsables de estos actos reprobables".

La portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Adrienne Watson, condenó los ataques como "no provocados" y enfatizó que "no se atacó a personal ni instalaciones estadounidenses".