Crisis política en Puerto Rico tras filtraciones del gobierno

Más de 900 páginas de conversaciones a través de chats entre miembros del gobierno de Puerto Rico han provocado una profunda crisis política en el país, acompañada de numerosas manifestaciones demandando la dimisión del gobernador.

La revelación, hecha por el Centro de Periodismo de Investigación, de más de 900 páginas de conversaciones a través de chats entre miembros del gobierno de Puerto Rico, ha provocado una profunda crisis política acompañada de numerosas manifestaciones demandando la dimisión del gobernador Ricardo Rosselló.

Las conversaciones, entre el gobernador y un gran grupo de sus ejecutivos gubernamentales de su confianza, están plagadas de comentarios machistas y homofóbicos, así como de bromas vejatorias contra gente en situaciones delicadas como las numerosas víctimas del huracán que devastó la isla caribeña hace un año.

La reprobación ante los comentarios publicados fue inmediata y desató fuertes movilizaciones ciudadanas desde el pasado lunes, dejando a numerosos heridos y detenidos en manos de las fuerzas policiales en San Juan, la capital. También han habido manifestaciones en numerosas ciudades de los Estados Unidos donde residen los puertoriqueños como Nueva York, Miami, Orlando o Washington.

Las protestas tienen el apoyo de varias personalidades del mundo de la cultura y el entretenimiento de Puerto Rico, de proyección internacional, como los cantantes Ricky Martin, René Pérez (Residente de Calle 13) y Brad Bunny, a quienes se les ha unido el conocido actor y director de cine Benicio del Toro, Luis Fonsi y los músicos de reguetón Wisin y Daddy Yankee, entre otros.

Las presiones ya han logrado la dimisión de 11 miembros del gabinete del gobernador, pero las protestas demandan la inmediata dimisión del mismo.

El cantante Ricky Martin, en referencia al tono y el contenido de las conversaciones reveladas, ha declarado: “Son del todo repudiables y denotan el carácter y la personalidad intolerante, arrogante, homofóbica, machista y violenta de esta gente”.

Por su parte, un portavoz de la Casa Blanca ha dicho que la revelación “prueba que las preocupaciones del presidente Trump sobre la mala gestión, la politización y la corrupción son válidas”, en una clara referencia a la controversa negativa de Donald Trump a declarar la isla zona de catástrofe y contribuir con fondos federales por el huracán del año pasado, que afectó gravemente a cientos de miles de personas.

Al mismo tiempo que la población de la isla se movilizó masivamente contra el gobernador, el FBI arrestó a dos ex funcionarios cercanos a Rosselló por corrupción.

Debe recordarse que Puerto Rico se considera un “Estado asociado” de los Estados Unidos, por lo que goza de cierto grado de autonomía y elige a su Gobernador, pero cualquier asunto de importancia en el territorio debe ser aprobado por el Senado de los Estados Unidos.

La ONU y la comunidad internacional solo reconocen Puerto Rico como un territorio colonial, ocupado durante la guerra hispanoamericana en 1898 y, por lo tanto, sujeto a la responsabilidad estadounidense.

El gobernador Rosselló es miembro del Partido Demócrata de América del Norte y un firme defensor de la “anexión” de la isla como estado miembro de los Estados Unidos.

La población registrada en la isla asciende a alrededor de tres millones y medio, mientras que según las estimaciones, aproximadamente cinco millones y medio de personas, incluidos los emigrantes puertorriqueños y sus descendientes directos, viven en los Estados Unidos.