La policía atacó una protesta organizada por el sindicato de educación Eğitim-Sen en Ankara. Los profesores habían intentado marchar frente al Parlamento turco para protestar contra la "Ley de la profesión docente" que se estaba debatiendo, cuando la policía atacó a los manifestantes con porras y gas pimienta. En el proceso, 15 de los manifestantes fueron detenidos. Además, muchas de las personas que fueron rociadas con espray de pimienta a corta distancia se desmayaron.

Resistiremos hasta el final.

A pesar de los ataques los profesores continuaron su protesta, pero fueron detenidos de nuevo. Finalmente, gracias a la perseverancia, llegaron al parque del Parlamento. El presidente general de Eğitim-Sen, Kemal Irmak, declaró: "Si la policía es obstinada, nosotros lo seremos aún más. Resistiremos hasta el final. Recuperaremos a nuestros amigos detenidos".

Ley de la profesión docente: neoliberalización, corrupción y represión

Eğitim-Sen critica claramente el proyecto de ley: "Su contenido desacredita la profesión docente, no ofrece soluciones a los problemas económicos de los profesores y suprime el principio de igual salario por igual trabajo. Debilita los derechos personales de los profesores y aumenta la discriminación y la desigualdad entre ellos." El sindicato critica que el proyecto de ley no incluya ninguna regulación para los salarios de los profesores de los centros públicos y, en cambio, diferencie entre el sector público y el privado.

La profesión docente en Turquía: un billete hacia la precariedad

El proyecto de ley no aborda suficientemente las necesidades y expectativas reales de los profesores y no incluye esfuerzos globales para mejorar su estatus social. La profesión docente en Turquía está muy mal pagada: el salario bruto más alto para los profesores es de poco más de 1.000 euros y el coste de la vida está al nivel europeo debido a la inflación. Se dice que los profesores en prácticas reciben mucho menos de la mitad de esta cantidad. La situación es mucho más precaria para los profesores de las escuelas públicas.

Al mismo tiempo, es evidente que los profesores temen ataques aún más fuertes del régimen contra su libertad de enseñar. El proyecto de ley regula detalladamente las sanciones disciplinarias para los profesores en prácticas y los docentes. El sindicato ve una clara amenaza para la seguridad laboral de los profesores, similar a las posibilidades de ascenso previstas, totalmente opacas, y recuerda la arbitrariedad ya reinante hacia los profesores. La introducción de ascensos "basados en el rendimiento" también aumentaría la competencia y devaluaría la profesión docente en general.